Durante el Foro Económico Mundial, realizado el pasado 22 de enero de 2019, en Davos (Suiza), el presidente Lenín Moreno abordó la situación económica y social del país. En su intervención, el exvicepresidente se refirió al femicidio de Diana Ramírez, ocurrido en Ibarra el 19 de enero.
«El caso del asesinato de una mujer por parte de un ciudadano venezolano es un tema que, sin duda, por lo catastrófico que suele ser ver este tipo de actos porque además fue filmado, asusta, estremece; pero, si vamos por estadísticas, está dentro de las estadísticas la posibilidad de que eso ocurra. Pero claro, no es que está bien y nosotros hemos de tratar de evitarlo. Y creo que podemos mejorar bastante, si apelamos a este recurso de solicitar el pasado judicial y exigir al Gobierno venezolano, como corresponde, que nos proporcione el pasado judicial para acoger de mejor manera a los hermanos venezolanos en nuestro territorio».
Declaraciones de Lenín Moreno en el minutó 38» 10′
La declaración del Primer Mandatario se enmarca en la premisa de que solicitar el pasado judicial de quienes migran desde Venezuela le permitirá al Gobierno combatir la violencia de género. La afirmación del Ejecutivo ecuatoriano no se corresponde con las estadísticas oficiales, que no recogen el dato en torno a la nacionalidad del femicida, y con los datos de Organismos no Gubernamentales enfocados en combatir la violencia de género en el país.
En el Perfil del femicidio, elaborado con datos de noviembre de 2018 por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), se exponen datos en torno a este delito. Por ejemplo, se indica que 7 de cada 10 ocurrieron en un lugar privado y que cada 3 días una mujer es asesinada. Sin embargo, ninguna de las variables se relacionan con la nacionalidad del victimario.
Geraldine Guerra, vicepresidente de la Asociación Latinoamericana para el Desarrollo Alternativo (Aldea), cuestionó la afirmación de Moreno. Para la activista, el Gobierno, a través del Presidente, intenta convertir el problema estructural del femicidio en un problema migratorio. «Esto es totalmente incorrecto. Según nuestro estudio, el 90% de femicidas que actuaron en Ecuador durante 2018 son ecuatorianos», destacó.
Guerra afirmó que, entre 2014 y 2018, 600 mujeres fueron asesinadas por razones de género. En 2018, Aldea registró 88 femicidios. Para la Asociación, la nacionalidad del femicida no es un dato relevante en la investigación, ya que «no se debe permitir que se desvíe la atención en torno a la violencia en contra de las mujeres hacia la llegada de extranjeros. Dejamos claro y rotundo que no tiene nada que ver».
Tras una revisión aleatoria de 12 casos ocurridos en el país entre 2016 y 2019, se identificó dos en que el asesino fue un extranjero. En agosto de 2017 la Policía Nacional arrestó a un ciudadano español por la muerte de Paola Moromenacho. El hombre era expareja de la víctima. En enero de 2019, un venezolano ultimó a Diana Ramírez, en Ibarra.
En el mismo período, en Ecuador se registran, al menos, tres muertes violentas de mujeres extranjeras. En 2016, las argentinas María José Coni y Marina Menegazzo fueron asesinadas por dos ecuatorianos. En marzo de 2018, la Policía halló en una vía de Manta el cadáver desnudo de la venezolana Lorena Cardozo. El mismo mes, la colombiana Damaris Montealegre Vega murió tras recibir dos disparos en la cabeza; los criminales eran ecuatorianos.
