Anunció regularización de al menos 400 barrios, anticipó firmeza con el Gobierno, reuniones con transportistas y pidió al Concejo saliente “saque” a los concejales de las empresas públicas.
Dominado por completo por el entusiasmo llegó esta mañana, a su primer encuentro con la prensa, el alcalde electo de Quito, Pabel Muñoz. Entonces, declaró que ya no se debe a la organización política con la que ganó las elecciones, sino a la ciudad.
“Me debo a los dos”, aclaró, un par de minutos después, al responder la primera pregunta sobre las relaciones políticas que imprimirá en la administración municipal que asumirá a partir de 14 de mayo, y sobre los cuestionamientos de su principal líder, Rafael Correa, por su cercanía con el dirigente de la misma organización en Quito y exalcalde, Augusto Barrera.
Entonces, dejó claro que será coherente con los principios de la organización política en la que ha militado 15 años y que Barrera no participará en su administración. Una vez despejadas estas dudas políticas, Muñoz empezó a responder inquietudes de cómo concretará el anuncio que acababa de hacer, de enfocarse en resolver los problemas de inseguridad, pobreza y desempleo en la ciudad.
Primero dijo que necesitará tres meses para realizar diagnósticos sobre la “dramática situación” en la que se encuentra Quito, y que para realizar estos diagnósticos necesita la ayuda de los periodistas, que reportan lo que pasa en la ciudad y que desea desayunar con la prensa una vez al mes.
Pero antes de asumir la conducción del Municipio, señaló Muñoz, necesita, no sólo una transición ordenada, que acordará la próxima semana en una reunión privada con el alcalde saliente, Santiago Guarderas; sino que este gestione ante el Concejo Metropolitano una ordenanza para “sacar” a los concejales de los directorios de las empresas municipales.
La política local
Del nuevo Concejo, en el cual no tendrá mayoría absoluta, agregó, espera que en la misma sesión inaugural del nuevo período 2023-2027, empiece a aprobar la regulación de entre 400 y 500 barrios y que se prohíban nuevas regularizaciones por al menos 30 o 40 años.
No hay datos exactos de esos barrios, acotó, luego de señalar que las realidades que enfrentan sectores desatendidos difieren de los discursos de varias administraciones municipales de que la cobertura de agua potable y otros servicios básicos llega casi al 100% de la ciudad.
Un posible mecanismo de regularización será “por grupos” de barrios que tienen más tiempo de espera y que cumplen requisitos de ley.
La movilidad de la ciudad
Un cronograma de lo que llamó “plan de modernización del transporte público”, anunció Muñoz para antes de su posesión, lo cual está condicionado a un posible acuerdo que busca concretar en los próximos días con los transportistas para redistribuir las rutas y frecuencias, y que se enfocará en la “verdadera inauguración” del Metro de Quito.
En cuatro reuniones previas con dichos dirigentes, Muñoz ha visto predisposición a agilizar el proceso: “Yo tendré toda la predisposición de diálogo y consenso con el sector de transporte, pero cuando no nos pongamos de acuerdo, será el interés de la ciudad el que prime”.
Se trata de uno de los temas pendientes que, en los últimos años, desde que se anunció el proyecto del Metro de Quito, no han podido concretar las administraciones municipales de los alcaldes Augusto Barrera, Mauricio Rodas, el destituido Jorge Yunda y su reemplazo, Santiago Guarderas.
De estas nuevas rutas, como se conoce, no sólo dependen las rutas que conectan al Metro de Quito, sino también un “sistema único de recaudo” o forma de cobro de pasajes, con el que fue diseñado el propio proyecto del Metro de Quito y sus 15 estaciones.
César Arias, consultor internacional de movilidad e impulsor del Trolebús, sostuvo que la nueva administración debe priorizar la implementación de una “tarjeta electrónica”, como un mecanismo viable y realista para aplicar tarifas diferenciadas: “Con este sistema de recaudo con tarjeta electrónica se puede cobrar una tarifa diferenciada, un poco más para quienes sí pueden y una tarifa subsidiada para una parte de la población que no puede pagar la tarifa mínima”.
El experto también dijo que al nuevo Alcalde le espera concretar su oferta de “movilidad sostenible”, lo cual, en la práctica implicaría que los corredores del Trolebús, la Ecovía, Corredor Central y otros corredores municipales, funcionen con articulados eléctricos.
Seguridad
En materia de seguridad, Muñoz anticipó que reclamará “con firmeza” al Gobierno nacional que a la ciudad no se le quiten los policías que requiere. El experto en seguridad Freddy Rivera comentó que la nueva gestión municipal de Muñoz en materia de seguridad requiere, en primer lugar, de un “diagnóstico casa adentro”.
“Previo a la planificación de la seguridad, se requiere que se transparente y se cuantifiquen los montos y destinos, es decir, cuánto se recauda por diferentes tasas y cómo el Municipio la utiliza para la seguridad”, dijo Rivera.
También recomendó que se diseñen medidas técnicas de seguridad que, de manera obligatoria, debe cumplir el Municipio, como es el de la conformación de consejos cantonales de seguridad ciudadana, en los cuales la ciudadanía y las autoridades municipales deben acordar iniciativas para combatir la seguridad ciudadana.
Inversiones
Muñoz también anunció que convocará a mesas de inversión por 6.000 millones de dólares, para el desarrollo de proyectos estratégicos en la ciudad. No anticipó, sin embargo, mecanismos específicos para atraer a posibles inversiones privadas.
Según el dirigente de los empresarios turísticos de La Floresta, Juan Baquerizo, para atraer inversiones que permitan una reactivación económica, en particular del turismo, se requiere primero un plan realista de seguridad.
Para esto, agregó, se requiere dialogar con quienes cada día mueven la economía local, conocer sus necesidades de seguridad, que hoy se ha vuelto un tema condicionante para la ciudad. “Sin seguridad no se mueve la ciudad y no habrá inversiones”, acotó el representante.
OTROS ANUNCIOS
RELACIÓN CON EL GOBIERNO
La relación con el Gobierno de Guillermo Lasso será un 50% “de apertura para trabajar en las acciones que Quito requiere” y el otro 50% de exigencia de lo que al Ejecutivo le corresponde con la ciudad, por ejemplo, una deuda de cerca de 200 millones de dólares.
FISCALIZACIÓN
Muñoz dijo que realizará una fiscalización “dura, severa, pero alejada del show”,
METRO
Pidió a la administración saliente que “no acelere de mayo a marzo la operación comercial del Metro”.
EQUIPO
Para seleccionar su equipo de trabajo en las distintas empresas e instituciones municipales dijo que “aplicará un criterio de paridad de género” y de perfiles técnicos especialistas.
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