Fernández y Lasso tuvieron un intercambio de cartas por la fuga de Duarte
El presidente argentino aseguró que la expulsión del exembajador de Argentina en Quito le pareció desmesurada y le sugirió al presidente Lasso que remedie la situación.
Argentina y Ecuador viven en tensión diplomática tras la fuga de la exministra correísta María de los Ángeles Duarte, sentenciada por corrupción y ahora prófuga de la justicia.
Una publicación en redes sociales asegura que el presidente de Argentina, Alberto Fernández envió una carta a su homólogo, Guillermo Lasso, en donde le habría dicho: “Verás, bobo HP, mi embajador no es carcelero ni empleado tuyo. Si tienes un poquito de cerebro, rectifica, pero yo voy a tratar de mantener las relaciones con Ecuador hasta que te saquen a patadas”. Este contenido es falso; el primer mandatario argentino sí le envió una carta a Lasso, pero no mencionó esa frase en su carta.
El 20 de marzo, el presidente Lasso le dijo a Fernández que le apena mucho que haya puesto por delante su amistad personal con el expresidente Rafael Correa y su identidad política sobre la relación fraterna entre Argentina y Ecuador.
Este pronunciamiento se dio luego de que la exministra de Transporte y Obras Públicas, María de los Ángeles Duarte se fugó de la Embajada de Argentina el pasado 14 de marzo. Duarte fue sentenciada a ocho años de prisión por el “caso Sobornos 2012-2016”, al igual que Correa.
La exfuncionaria se pronunció ese día, a través de Twitter y agradeció a Argentina por haberla “cobijado ante la persecución de los gobiernos de Lenín Moreno y Guillermo Lasso”.
“Decidí dejar la Embajada porque, al negar el salvoconducto que me correspondía como asilada política, de acuerdo con la convención de Caracas de 1954 e impedir mi salida segura, el Gobierno ecuatoriano me convirtió en su rehén política. Tuve que salir bajo riesgo, pero ejercí el derecho que me asistía”, afirmó Duarte.
Frente a este hecho, el canciller, Juan Carlos Holguín, informó que el Gobierno declaró “persona non grata” al embajador de Argentina en Ecuador y que le daban un plazo para retirarse del territorio ecuatoriano. Argentina respondió de la misma manera y solicitó al embajador ecuatoriano retirarse de su país.
Por eso, Fernández respondió con una carta a Lasso en Twitter. En la carta menciona: “Con más pesar que placer he leído sus comentarios originados en la salida de Ecuador de María de los Ángeles Duarte (…) y la cual Argentina había concedido asilo político”.
Y dijo que le ha parecido desmesurada la reacción de expulsar al embajador, que es lo que verdaderamente lastima el buen vínculo entre los argentinos y ecuatorianos. Por ello, detalló que la situación es fácil de remediar e instó a Lasso a reflexionar sobre lo que hizo y a corregirlo.
“Presidente Guillermo Lasso, reciba estas palabras con el sincero afecto de siempre. Haga el esfuerzo de no mezclar este incidente producto de la impericia de oficiales del Estado ecuatoriano con el amor que a nuestros pueblos vincula”, expresó Fernández.
El primer mandatario de Ecuador respondió, en otra carta: “No, la decisión del Estado ecuatoriano fue la correcta y obligado por las inconsistencias, falsedades y dudas de su exembajador, que se mostró en todo instante como un operador político y no como un digno representante del pueblo argentino”.
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