Sin el paro, la industria avícola esperaba vender 3.900 millones de huevos este año; con el paro, calculan que alcanzarán apenas a 3.500 millones. Esto no sólo golpea a las empresas productoras, sino, tangencialmente, a otros sectores, como las panaderías.
POR: Andrés Mediavilla, estudiante de periodismo de la USFQ.
Árbol en la ruta hacia Puéllaro. Foto realizada por Andrés Mediavilla
El paro nacional afectó tanto la venta como la producción de huevos. Según Diana Espín, directora ejecutiva de la Corporación Nacional de Avicultores de Ecuador, alrededor de 90 millones de huevos no fueron comercializados debido al bloqueo de las vías. Con esa escasez, panaderías y pastelerías se vieron en la necesidad de buscar directamente en las zonas de producción.
Durante la segunda semana del paro nacional, la Pastelería Hermanos Flores se quedó prácticamente sin huevos para sus postres. Para sostenerse, unos días tuvieron que comprar las cubetas en supermercados de Quito. “La gente nos veía feo, porque pensaban que estábamos acabando con los huevos de todos”, comenta Viviana Flores, la dueña del local.
Luego, Flores contactó a distribuidores del sector de Puéllaro, conocido por ser uno de los máximos productores de huevos para Quito. Consiguieron 250 cubetas, pero debían ir personalmente a retirarlas. El sábado anterior, a las 21:00, junto con su esposo, Wilson Mediavilla y sus dos hijos, Flores realizó el viaje desde Pusuquí. La única vía posible para transitar era la Culebrilla, un camino estrecho y peligroso. Para llegar pasaron por San Antonio de Pichincha, una de las zonas que más conflicto vivió durante el bloqueo de calles por el paro. Piedras gigantes, montañas de material y tierra, árboles caídos y ceniza cubrían la vía. El viaje a Puéllaro les tomó 1 hora, 25 minutos más de lo que normalmente les tomaría.
“No se veía nada porque en la noche cae la neblina y, al ser un camino difícil de recorrer, se volvió muy peligroso. Parecíamos contrabandistas y sólo queríamos conseguir materia prima para trabajar”, explica Wilson Mediavilla. Los precios se inflaron debido a la escasez. En tiendas hubo gente que pasó de pagar 3 a pagar 7 o hasta 10 dólares por una cubeta.
Letrero en el parque dé Puéllaro. Foto realizada por Andrés Mediavilla
Puéllaro es una parroquia rural de Quito, con alrededor de 5.900 habitantes. La zona tiene un área de 72,28 km2 y una altitud de 2020 metros sobre el nivel del mar. Actualmente, la producción de huevos que alcanza la zona es de 400.000 diarios, según el médico veterinario Édgar Navarrete Torres, funcionario de Avirico.
Jorge Luis Guamaní distribuye huevos para San Antonio de Pichincha: “Yo traigo las cubetas desde Cayambe, no tuve producto por 2 semanas y no pude trabajar, las vías estaban bloqueadas y los camiones no podían circular por que era peligroso”, explica Guamaní. Al momento de buscar huevos, se encontró con precios muy elevados. “Me ofrecían las cubetas desde 5 dólares desde Puéllaro, pero no se podía circular por el cierre de vías”, agrega Guamani.
César Vallejo es dueño de una pequeña panadería en el norte de la capital. Por la necesidad de seguir trabajando, tuvo que pagar más por la materia prima necesaria. “Antes compraba las cubetas a 3 dólares, pero por el paro llegué a pagar 4 y no encontraba las cantidades que necesitaba. Compré con sobreprecio sólo para poder sobrevivir, ya que no ganaba nada”, comentó Vallejo.
Según Diana Espín, el valor bruto de la avicultura del Ecuador es de 2 mil millones de dólares y esto representa el 2% del PIB Nacional. La industria avícola genera alrededor de 220 mil empleos directos. El país tenía como plan hasta 3900 millones de huevos, pero debido al paro se espera que la producción llegue a 3500 millones de unidades en el 2022.