El Sol puede influir en el clima de la Tierra, pero no es responsable del calentamiento
La NASA asegura en un artículo que el calentamiento global es impulsado por las actividades humanas. El hecho ocurre desde mediados del siglo XX.
Los temas preferidos por los desinformadores son el clima, la NASA y desastres naturales.
Por ejemplo, en Twitter, Facebook y TikTok, circulan varias publicaciones que aseguran que la Nasa admite que el cambio climático se debe a los cambios en la órbita solar de la Tierra, no al ser humano ni a los combustibles fósiles. Y con eso se “destapa la mentira de Al Gore, Greta Thunberg y demás globalistas”. Este contenido es falso. No hay ningún registro de que la NASA haya asegurado que el cambio climático solo se debe a la posición orbital de la Tierra en relación con el sol.
De hecho, la Nasa compartió una investigación en la que se asegura que las actividades humanas sí están impulsando la tendencia al calentamiento global y este hecho es observado desde mediados del siglo XX.
En la página oficial de Global Climate Change de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA, publicó el 9 de junio, un artículo titulado “¿El Sol está causando el calentamiento global?, en este, la NASA niega que el cambio climático sea por cambios en la órbita terrestre.
“No. El Sol puede influir en el clima de la Tierra, pero no es responsable de la tendencia al calentamiento que hemos visto en las últimas décadas. El Sol es dador de vida; ayuda a mantener el planeta lo suficientemente cálido para que podamos sobrevivir”, explica el organismo.
En el artículo se menciona que los cambios sutiles en la órbita de la Tierra alrededor del Sol son responsables de las idas y venidas de las edades de hielo. Pero el calentamiento que han visto en las últimas décadas es demasiado rápido para vincularlo a cambios en la órbita de la Tierra y demasiado grande para ser causado por la actividad solar.
Con ello, se aclara que lo que asegura el post de redes sociales con más de 1 millón de reproducciones es falso. Este contenido desinformativo coloca una dirección web, que redirige a un documento publicado en 2019 y habla sobre las variaciones orbitales de la Tierra. Esta es una teoría que fue propuesta por el científico Milutin Milankovitch, publicado por la NASA en el 2000.
La teoría elaborada por Milankovitch correlacionaba la sucesión de glaciaciones y períodos interglaciales con los cambios en la órbita terrestre, ya que la variación en la radiación solar causada por la mayor cercanía al Sol incide en la temperatura terrestre, causando, en el pasado, cambios en el clima
Frente a esa afirmación, la misma Agencia, afirma en su artículo que una de las pruebas irrefutables en las que se muestra que el Sol no está causando el calentamiento global proviene de observar la cantidad de energía solar que llega a la parte superior de la atmósfera.
De hecho, desde 1978, los científicos han rastreado este comportamiento y han utilizado sensores en satélites, con lo que señalan que no ha habido una tendencia al alza en la cantidad de energía solar que llega a nuestro planeta.
Una segunda prueba es que, si el Sol fuera responsable del calentamiento global, “esperaríamos ver un calentamiento en todas las capas de la atmósfera, desde la superficie hasta la atmósfera superior (estratosfera)”, asegura la Agencia. Sin embargo, lo que en realidad se ve es un calentamiento en la superficie y un enfriamiento en la estratosfera.
“Esto es consistente con el calentamiento causado por una acumulación de gases que atrapan el calor cerca de la superficie de la Tierra, y no porque el Sol caliente más”, mencionan los científicos.
Las causas del cambio climático
En el artículo, los científicos de la NASA atribuyen la tendencia del calentamiento global observada desde mediados del siglo XX a la expansión humana del «efecto invernadero», el calentamiento que se produce cuando la atmósfera atrapa el calor que se irradia desde la Tierra hacia el espacio.
Además, explican que la vida en la Tierra depende de la energía proveniente del Sol. Alrededor de la mitad de la energía luminosa que llega a la atmósfera de la Tierra pasa a través del aire y las nubes hacia la superficie, donde es absorbida e irradiada en forma de calor infrarrojo. Aproximadamente, el 90% de este calor es absorbido por los gases de efecto invernadero e irradiado nuevamente, lo que ralentiza la pérdida de calor hacia el espacio.
Por ello concluyen que la actividad humana es la causa del aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero, pues durante el último siglo, la quema de combustibles fósiles como el carbón y el petróleo, ha aumentado la concentración de dióxido de carbono atmosférico (CO2).
Este aumento se debe a que el proceso de combustión del carbón o del petróleo combina el carbono con el oxígeno del aire para producir CO2. En menor medida, el desmonte de tierras para la agricultura, la industria y otras actividades humanas ha aumentado las concentraciones de gases de efecto invernadero.
Cambios de temperatura
El gráfico mostrado a continuación compara los cambios de temperatura de la superficie global (línea roja) y la energía del Sol recibida por la Tierra (línea amarilla) en vatios -unidades de energía- por metro cuadrado desde 1880.
Tomado de: climate. Nasa.gov.
Las líneas más delgadas muestran los niveles anuales, mientras que, las líneas más gruesas muestran las tendencias promedio de 11 años. Los científicos dicen que se utilizan promedios de once años para reducir el ruido natural de año a año en los datos, lo que hace que “las tendencias subyacentes sean más obvias”.
La cantidad de energía solar que recibe la Tierra ha seguido el ciclo natural de 11 años del Sol de pequeños altibajos sin aumento neto desde la década de 1950. Durante el mismo período, la temperatura global ha aumentado notablemente. “Por lo tanto, es extremadamente improbable que el Sol haya causado la tendencia de calentamiento global observada durante el último medio siglo”, enfatiza la Nasa.
¿Por qué el post menciona a Thunberg?
Greta Thunberg es una activista medioambiental sueca, su nombre sonó cuando ella tenía 15 años y comenzó su protesta solitaria para exigir acciones contra el cambio climático.
Ella ha formado manifestaciones frente al Parlamento sueco, unas huelgas estudiantiles por el clima que se denominaban Fridays for future.
Su prioridad actual es que, dichos gobiernos se tomen en serio el cumplimiento del acuerdo de París, que es el pacto vinculante firmado en diciembre de 2015 por 195 países que se comprometían a limitar el aumento de la temperatura media global a 1, 5 °C reduciendo, entre otros aspectos, las emisiones de gases de efecto invernadero.
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