A través de la plataforma de mensajería instantánea WhatsApp circula un texto que asegura que la compañía biofarmacéutica Merck “toma distancia” en el desarrollo de la vacuna para combatir el Covid-19 porque su fabricación debe hacerse a través de una rigurosa evaluación científica. Pese a que Merck ha advertido lo complejo que es desarrollar una vacuna, si está participando en el desarrollo de la misma.
El mensaje que circula en WhatsApp recoge declaraciones de Ken Frazier, director ejecutivo de Merck, en una entrevista para la Facultad Empresarial de la Universidad de Harvard realizada en junio de este año. Allí indicó que se debe tomar en cuenta que la vacuna que más rápido se ha fabricado ha sido para prevenir las paperas y que fabricarla tomó alrededor de casi cuatro años. Además, advirtió que la vacuna contra el Covid-19, a pesar de su acelerado desarrollo, requiere de una estricta evaluación científica.
Sin embargo, esto no quiere decir que Merck no participa en la fabricación de la vacuna, pues el 26 de mayo de 2020 la compañía indicó en un comunicado oficial que trabaja en colaboración con Ridgeback Bio, una empresa de biotecnología enfocada en estudiar enfermedades infecciosas y huérfanas. Esta cooperación busca desarrollar la vacuna contra el SARS-CoV-2 / COVID-19. Con el mismo objetivo, Merck indicó que trabajan con IAVI (Iniciativa Internacional de Vacunas, por sus siglas en inglés) y Themis (productos farmacéuticos).
Adicionalmente, en la página web de Merck, el doctor Roger Perlmutter, presidente de Laboratorios Merck apuntó que, el Covid-19 es un reto científico y de salud mundial por lo que trabaja con distintas organizaciones a nivel internacional para desarrollar antiinfecciosos y vacunas para contrarrestar el coronavirus, precautelando la seguridad de los pacientes.
Un artículo del Foro Económico Mundial indica que las empresas tienen una responsabilidad para el desarrollo de la vacuna para combatir la pandemia ocasionada por el coronavirus y para ello es importante la experiencia colectiva y la coalición de las empresas comprometidas en el desarrollo de las vacunas. En este mismo artículo recalca que las empresas biofarmacéuticas, científicos y los institutos reguladores de la salud han reforzado su compromiso para garantizar que las vacunas se aprueben de acuerdo a los estándares internacionales de calidad, éticos y principios científicos. Asimismo señala que la confianza del público es la base del éxito en todos los sistemas de inmunización.