POR: Hugo Constante
El Tribunal de Disciplina de Pachakutik oficializó la expulsión del movimiento para seis de sus nueve legisladores, por haber votado de manera permanente con la bancada de ADN: Carmen Tiupul, Cecilia Baltazar, José Nango, Fernando Nantipia, Edmundo Cerda y Manuel Choro. Ratificó así la sanción impuesta por la Conaie, organización de base del movimiento indígena.
Con la medida tomada, Pachakutik se queda con tres de los nueve legisladores que obtuvo en las últimas elecciones: Mariana Yumbay, Álex Toapanta y Dina Farinango. “Ganamos nueve legisladores, pero desafortunadamente cuando la Asamblea inició este periodo solo quedamos tres. El resto se alineó con el Gobierno, no sé cuáles fueron los acuerdos, pero asumo que fueron por cargos”, dijo Yumbay. Añadió que la expulsión fue porque votaron con la bancada oficialista para aprobar leyes que ella calificó de inconstitucionales, y agregó que tienen que asumir la responsabilidad de sus actos.
El fraccionamiento de Pachakutik, las acusaciones de que unos se suman al oficialismo, traicionando los principios de la agrupación y que otros responden a las bases, así como los señalamientos a la dirigencia no son nuevos en el movimiento.
Ocurrió en 2021, cuando obtuvo 27 curules, un logro histórico que le permitió ser, de manera sorpresiva, la segunda fuerza política con cuadros representativos como Salvador Quishpe y Guadalupe Llori, quien hasta logró la Presidencia de la Asamblea con votos de CREO, el movimiento de Guillermo Lasso, que gobernaba en esa época.
No pasó mucho tiempo y Llori fue destituida como presidenta de la Legislatura y el bloque se dividió en tres y hasta en cuatro ‘minibloques’, cada uno con sus intereses particulares.
Álex Toapanta, asambleísta en funciones y de oposición al Gobierno, dijo que el problema de fondo es que, en campaña, algunos candidatos de la agrupación asumen las reivindicaciones del movimiento, pero que llegan al poder y se olvidan de los postulados que impulsan a Pachakutik. “Nuestro dirigentes deben ser mucho más minuciosos para establecer mecanismos de selección rigurosos, para que, una vez electos, no terminen poniéndose del otro lado”, dijo Toapanta.
Los expulsados
En una demostración más de profunda división interna, inclusive para hacer frente a una sanción, cinco de los seis asambleístas expulsados expusieron por separado sus críticas a la medida tomada por el Tribunal de Disciplina.
Por un lado, se presentaron los legisladores amazónicos Fernando Nantipia (Morona Santiago), Edmundo Cerda (Napo) y José Luis Nango (Pastaza). Este último asumió la vocería del grupo y su primera reacción fue acusar al coordinador nacional de Pachakutik, Guillermo Churuchumbi, y al expresidente de la Conaie Leonidas Iza de ser correístas y que, como ellos no se prestaron para actuar con ese bloque legislativo, la consecuencia fue expulsarlos. “A nosotros nos obligaron y nos dijeron con resoluciones que, si no votamos con el correísmo, íbamos a ser expulsados. Hoy nos asombramos de que hayan tomado esa decisión”, dijo Nango y anticipó que apelarán ante el Tribunal Contencioso Electoral.
Desde el inicio de este periodo legislativo, este grupo amazónico ha apoyado con sus votos toda iniciativa legislativa que provenga del oficialismo. Nango asegura que lo han hecho porque siempre han incluido sus recomendaciones y observaciones a los temas tratados, no porque les hayan ofrecido cargos u otros incentivos.
Además de haber pertenecido a Pachakutik, ellos forman parte de la Confeniae, la regional amazónica de la Conaie, que en la segunda vuelta presidencial oficializó su apoyo a Daniel Noboa, aunque esta semana anunció que retiraba ese respaldo tras la eliminación del subsidio al diésel por parte del Gobierno.
Mientras que Cecila Baltazar (Tungurahua) indicó tres motivos por los que fue expulsada: por buscar la seguridad de los ciudadanos, la eficiencia pública y por exigir que Pachakutik sea una “tercera” vía y no una alfombra de alguna organización política, peor aún del correísmo. “Es momento de que Pachakutik pueda avanzar solo, así lo soñaban nuestros abuelos para llegar a ser Gobierno”, dijo Baltazar.
La legisladora no desconoce que desde el inicio de la gestión hubo un acuerdo para apoyar al oficialismo, lo que fue validado inclusive, asegura, por Verónica Albuja, presidenta del Tribunal que los sancionó. “Sin embargo, a pesar de haber validado, ahora se lava las manos diciendo que hemos vulnerado los principios de Pachakutik”, dijo la legisladora. Concuerda con Nango en el sentido de que la dirigencia de Pachakutik tenía un acuerdo por el correísmo para recibir el apoyo en la Asamblea de los legisladores de Pachakutik. “A mí, particularmente, nunca se me comunicó el acuerdo que tenían con la Revolución Ciudadana”, añadió.
Por su parte, Manuel Choro (Cañar) se sumó a la criterio de que su expulsión obedece a que la dirigencia tenía un acuerdo para que los nueve legisladores que obtuvo el movimiento voten en la Asamblea con el correísmo para que obtengan puestos claves en las vicepresidencias y en el Consejo de Administración Legislativa (CAL), pero que ellos no se alinearon con esa agrupación por lo que han sido expulsados en un proceso al que calificó como viciado. Indicó que ha votado indistintamente con el oficialismo y en su contra, ya que todo ha dependido del contenido de los proyectos de Ley. “Cuando hemos tenido que apoyar un proyecto de ley que beneficie a los ecuatorianos, lo hemos hecho; pero también hemos votado en contra, hemos sido radicales en los proyectos de ley que perjudiquen al pueblo”, manifestó Choro.
La sexta expulsada, Carmen Tiupul, no quiso hablar con la prensa. Los asambleístas manifestaron que a pesar de la expulsión siguen perteneciendo a Pachakutik, ya que sus comunidades, sus provincias les dieron el voto y la confianza.
Te puede interesar:
. Es falso: el acuerdo con el FMI no incluye expresamente que el diésel suba a $4
. Es falso: no hay movilizaciones indígenas masivamente hacia donde está el presidente



