La principal crítica sigue siendo la demagogia que los expertos siguen viendo en los planes de los dos candidatos. Hay muchos enunciados, pero muy poco de cómo se van a ejecutar. Conozca los argumentos.
Los dos candidatos que pasaron a la segunda vuelta electoral asocian la seguridad ciudadana al delito y a la criminalidad. Según los expertos consultados, ninguno de los dos mira el tema de manera integral, sino que hacen propuestas “populistas”, basándose en el miedo de la gente por las olas de violencia, en lugar de plantear políticas de Estado a largo plazo.
Para Natalia Sierra, socióloga y catedrática universitaria, la seguridad ciudadana implica proponer desde el Estado y desde la sociedad, en general, que los habitantes tengan empleo formal, con una población educada que, a su vez, eduque a las futuras generaciones en códigos de sana convivencia. La seguridad ciudadana también implica que la gente tenga espacios públicos seguros, donde puedan compartir y disfrutar del entretenimiento, la naturaleza, con un buen sistema de transporte. Para Sierra, la seguridad ciudadana implica tener una política pública social clara.
“Actualmente, de lo que se ha escuchado, los candidatos sólo mantienen ofrecimientos demagógicos y populistas, aprovechándose de la angustia que viven los ecuatorianos. Pero ninguno plantea fortalecer el tejido social, entendiendo que el problema es estructural y se soluciona a largo plazo, con la implementación inmediata de políticas de Estado. Hasta ahora están generando promesas populistas penalizadoras”, indica Sierra.
Para Lautaro Ojeda, docente universitario y experto en seguridad, los candidatos no logran ni entender a qué se están enfrentando, no entienden cómo se maneja el crimen organizado, menos lo que es la seguridad ciudadana y su concepto global, que incluye la violencia interpersonal, social, que cada vez está menos presente en el debate, pero en la práctica existe. “El 40% de muertes está asociado a violencia social y no criminal y ese aspecto no está presente en los planes de gobierno de los candidatos”, enfatiza Ojeda.
Y agrega que “son planes generales, donde alcanzan a decir que fortalecerán las Fuerzas Armadas, hablan de depurar la Policía Nacional, sin identificar los mecanismos. Y lo que es peor, González ofrece aumentar los sueldos de la Policía, lo cual es populista y difícil, dada la precaria economía ecuatoriana”, señala el catedrático.
“Las propuestas que tienen más son de corte populista, no veo planteamientos sistemáticos, sobre todo deben tomar en cuenta el corto tiempo que tienen para gobernar: un año y medio; y, con base en esto, establecer un trabajo de mediano plazo, en el que la coordinación entre instituciones del Estado debe ser uno de los objetivos primordiales a realizar”, apunta.
Otros análisis
Sobre el crimen organizado, tema que está latente en la realidad ecuatoriana y en los planes de gobierno de los dos candidatos, el especialista en seguridad internacional Renato Rivera dijo en un medio de comunicación que el gobierno que esté administrando el país, además del equipamiento que debe dar a las fuerzas del orden, debe investigar los patrimonios, ya que el narcotráfico está dejando grandes rentabilidades. Indicó que anualmente en Ecuador se exportan 500 toneladas de droga que viene desde Colombia, se incauta una parte, pero el resto pasa por los puertos y este tránsito deja grandes ganancias a varios grupos. También agregó que el nuevo gobierno debe establecer nuevas funciones para la Policía Nacional y Fuerzas Armadas y se deben realizar investigaciones penitenciarias.
Sierra también señala que en los planes de gobierno de los candidatos se penaliza la actuación de los jóvenes que están involucrados en distintas bandas y no se ve que ellos están dentro por necesitad o por obligación, ya que los amenazan. “Siempre se dice ‘mano dura con los integrantes’, pero no hablan de investigar a las grandes empresas que no pueden justificar sus ingresos; es decir, hay lavado de dinero que no se investiga. En este negocio está implicado todo un sistema económico, que va desde los productores, los que transportan y los que lavan dinero producto del narcotráfico, incluso pueden estar involucrados grandes bancos a nivel mundial”, advierte la especialista.
Acciones sociales
Para terminar con la precariedad de los jóvenes que conforman estas bandas delictivas, en los planes de gobierno de los candidatos, se deben proponer posibilidades de empleo seguro, ya que la gran población ecuatoriana está abandonada y es allí donde el crimen organizado ingresa a dar una respuesta, analiza Sierra.
Y comenta que la propuesta del candidato Noboa sobre sistemas de control digital está bien, pero la experta aclara que antes debe depurar las filas policiales; si no, se va a fortalecer al mismo equipo que está involucrado con el narcotráfico. Y comenta que, si bien el candidato habla de dar empleo a los jóvenes, su binomio a la vicepresidencia habla de quitar la gratuidad a ciertos servicios, como la educación, lo cual contradice el equipo de Noboa.
Mientras tanto, sobre González apunta que sí propone políticas sociales en mínima cantidad, pero no dice cómo las va a realizar y concluye que los dos tienen propuestas demagógicas que no puntualizan en soluciones estructurales.
Para Diego Salazar, especialista en diseño urbano y presidente encargado del Colegio de Arquitectos de Pichincha, las edificaciones donde se construyan supuestas cárceles barcazas o las cárceles de máxima seguridad con lo de menos. “Tienen que buscar soluciones de fondo, la solución no está en la creación de más cárceles. Los verdaderos presos somos los ciudadanos, porque no salimos de las casas por las extorsiones, los secuestros, asesinatos. Pueden poner todas las cárceles que quieran, pero lo que se debe aumentar son las oportunidades de educación, de trabajo, mejorar la economía. Somos un país que tiene todas las condiciones para estar bien, pero el Estado nos coarta nuestras actividades con su precaria gestión”, comenta Salazar.
Freddy Rivera, experto en Seguridad y catedrático universitario, también está de acuerdo con la opinión de los anteriores analistas en que las propuestas de los candidatos son demagógicas y populistas. Y agrega que, en algunos casos, como aquello de comparar la época en la que gobernó Correa con la actual es irresponsable, pues hoy el crimen organizado ha ganado terreno en Ecuador y tiene al Estado acorralado, “emboscado”, por delincuentes insurgentes que utilizan estrategias de inteligencia, alta tecnología, cadenas logísticas, cargamentos de armas. “Son criminales en insurgencia porque la impunidad es su tabla de salvación. Las autoridades de justicia los sacan enseguida de la cárcel”, enfatiza.
Además, concluye que la sociedad ecuatoriana está bloqueada y de eso se aprovechan los políticos para hablar sin argumentos. Según Rivera, este bloqueo que sufre la población es en la economía, por las extorsiones que tienen que soportar, las llamadas ‘vacunas’, el vivir bajo amenazas. Aclaró también que la falta de ética y valores en el sistema judicial ya no se debe a una consecuencia de la corrupción, sino que esto forma parte de las estructuras criminales. “Sobrepasa la corrupción, son jueces que están comprados, pero a los cuales se les hace seguimiento porque son parte ya del crimen organizado, ellos pertenecen a esos grupos”, indicó.