El hecho se produjo entre la noche de este lunes 13 y la madrugada del 14 de septiembre y se presume que fue una acción del hampa, para luego cometer robos en la zona y no ser detectados.
A través de cuentas de Twitter personales se difundió este miércoles 15 de septiembre la información de que en el noroccidente de Quito residentes del sector y moradores encontraron varios perros muertos en las calles del barrio Caminos de Libertad. Sin embargo, no se trataba —al menos no todos— de perros callejeros. Incluso algunos yacían ya sin vida a las puertas de sus casas. La información es cierta.
20 perros murieron envenenados en el noroccidente de Quito. Los moradores salieron de sus viviendas y se encontraron con los canes sin vida acostados sobre la acera y junto a las puertas de algunas casas pic.twitter.com/gM6mK9SkSA
— Lucia Jaramillo (@Lucia_Jaramillo) September 15, 2021
El hecho se produjo entre la noche del lunes 13 y la madrugada del martes 14 de septiembre, cuando varios quiteños alertaron incluso a los dueños de mascotas. Los perros ya muertos fueron encontrados a lo largo de la calle B24 y su intersección con la perimetral derecha, en unas escalinatas de cemento, junto a los postes de alumbrado y otros puntos del vecindario.
Los moradores no tuvieron otra opción que llamar a la Empresa Metropolitana de Aseo para que levantara los cadáveres de los perros de la vía pública. Emaseo informó a Ecuador Chequea que ellos levantaron el cuerpo de 6 perros y el resto fueron enterrados por sus propios dueños.
Varios residentes de la zona declararon a los medios nacionales que desconocen las causas, pero sospechan que podría ser una acción del hampa, para a futuro cometer hechos delictivos en la zona sin ser detectados.
Lamentablemente, no es la primera vez que un hecho así ocurre en Quito, ya que medios locales (El Comercio) e internacionales (CNN) se hicieron eco de los envenenamientos masivos que entre el 12 y el 13 de julio del 2019 afectaron a tres albergues quiteños de animales.
En esa oportunidad, 27 perros murieron tras ingerir el alimento que contenía veneno y que había sido donado a las fundaciones distintas de la capital, hecho que enlutó a la comunidad animalista del país.



