No hay evidencia de que el Gobierno se haya comprometido a bajar salarios públicos
El FMI propone una reducción paulatina del gasto salarial en sueldos totales entre 2025 y 2028, equivalente a un ahorro anual de 0,2 y 0,3% del PIB. Pero esto no es sinónimo de bajar sueldos, sino que puede incluir las desvinculaciones anunciadas desde ayer.
POR: Redacción Ecuador Chequea
El 25 de abril de 2024, Ecuador y el Fondo Monetario Internacional (FMI) alcanzaron un acuerdo técnico para un programa de crédito tipo Servicio Ampliado (SAF) por $4 000 millones, con duración de 48 meses, es decir hasta 2028. Este mes, en cambio, se conoció de un nuevo desembolso como parte de este acuerdo y la ampliación por 1.000 millones más.
Bajo este contexto, una publicación en Facebook asegura que el presidente, Daniel Noboa, se comprometió con el FMI a bajar los sueldos en el sector público. Se califica este contenido como falso.
El FMI propone una reducción paulatina del gasto salarial en sueldos (que no es necesariamente lo mismo que reducción salarial) totales entre 2025 y 2028, equivalente a un ahorro anual de 0,2 y 0,3 % del PIB, es decir entre 258 millones, dentro de un plan fiscal más amplio. No se habla de recortar los sueldos existentes de manera directa. Más bien tiene que ver con recortar el tamaño del Estado, con acciones, por ejemplo, como la desvinculación de 5.000 funcionarios anunciada ayer, o las evaluaciones que vendrán tras la vigencia de la Ley de Integridad Pública y su Reglamento.
Las medidas para lograr el ajuste incluyen limitación de nuevas plazas, eficiencia en contratación y control del crecimiento de la nómina. El Gobierno se comprometió a planificar los aumentos de personal y salarios, previa evaluación, para mantener la funcionalidad del Estado.
Ecuador Chequea, revisó el último informe publicado por el FMI, denominado: ‘Segunda revisión en el marco del Acuerdo Ampliado del Fondo Ampliado, solicitud de aumento y reprogramación de la fecha de disponibilidad para la tercera revisión, y revisión de las garantías de financiamiento’, que fue publicado el 21 de julio, es decir cuatro días antes de que el Gobierno diera a conocer el despido de 5.000 servidores públicos.
El documento tiene 129 páginas y en la 54 el FMI propone el ajuste gradual del gasto.
El propio Fondo aclara que este ajuste no implica necesariamente despidos, ya que puede alcanzarse mediante alternativas como el congelamiento de nuevas incorporaciones, el aumento de la eficiencia operativa o la moderación del crecimiento automático del gasto público
Luego, en la página 69 del informe, se lee a lo que se comprometió el Gobierno de Daniel Noboa:
“Gasto salarial del sector público: nos comprometemos a continuar los esfuerzos para contener el gasto salarial del sector público, aprovechando los esfuerzos realizados en los últimos años. Para ello, planeamos limitar los aumentos de personal y de salarios. Con este fin, en 2024 emitimos una norma que exige que todos los salarios del sector público tengan un límite inferior al salario del presidente. También revisaremos y optimizaremos los contratos temporales. La estrategia se elaborará cuidadosamente para garantizar la prestación de servicios públicos de calidad y la necesaria contratación de personal policial adicional y de las fuerzas de seguridad nacional para contrarrestar la crisis de seguridad”.
Entonces, al leer los dos textos, se evidencia que esto no implica una reducción directa de los sueldos individuales de los servidores públicos, pues se trata de dos conceptos distintos.
El economista Santiago García aseguró a Ecuador Chequea que reducir el gasto salarial significa disminuir el gasto total en remuneraciones como porcentaje del PIB.
Para alcanzarlo, se propone aplicar mecanismos como: congelar nuevas contrataciones, no reemplazar vacantes cuando se produzcan jubilaciones o retiros, frenar el crecimiento automático del gasto en nómina mediante contratos temporales o promociones y mejorar la eficiencia en la gestión del personal.
Por otro lado, bajar los sueldos individuales implicaría recortes de sueldo nominales a los empleados, lo cual no es parte del planteamiento del FMI, pues en ninguna parte del documento se lee esto, aseguran que el ajuste se logra por otras vías, no por reducción directa de ingresos.
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