El ‘fantasma’ del alza de precios ya ronda en los mercados

septiembre 17, 2025

POR: Juan Camilo Escobar

“Lo ‘pite’ que hay, está con precios bien elevados. La ‘papa del norte’ que hasta el jueves, antes de la subida del diésel, logré comprar a 22, ahora me vendieron a 35 (dólares el quintal)”, comenta, Blanca Molina, una de las vendedoras más antiguas del mercado Santa Clara, en el centro norte de Quito.

No es simplemente una percepción personal ni un comentario aislado, según confirmaron más de 10 comerciantes consultadas: en el mercado Iñaquito, en el norte, y El Mayorista, en el sur, que puntualizaron dos de los efectos inmediatos del incremento en el precio del diésel.

El primero, las nuevas entregas de productos agrícolas provenientes desde provincias ya se están dando con precios al alza. Y el segundo, los precios de los fletes, es decir de los traslados en camiones o furgones, desde el Mayorista, también se incrementaron, de entre 8 a 10 a dólares a por lo menos 12 y hasta 15 dólares.

“Me dio bastante pena ver que no había casi nada de papa. Y eso que fui ahora, pensando que ya todo estaba normal luego de los bloqueos de la vía de todos estos días, por los que nos decían que no venían”, agrega.

Cerca del mediodía de hoy, Ecuador Chequea constató que el movimiento había caído de manera considerable, a tal punto que empleados de la administración municipal del mercado aprovechaban la ausencia casi total de vehículos frente al extenso galpón de bodegas de venta de papas para pintar el pavimento con líneas amarillas fluorescentes.

Las bodegas, sin embargo, permanecían abiertas, exhibiendo quintales de “papa del norte”, como se conoce a este tubérculo trasladado desde los campos de Carchi.

Acompañada de cuatro de sus “compañeros papistas del Carchi”, como se identifican con orgullo, María Casa comentó que “el quintal de la más buena subió de 32 a 35; el de la otra, que también es buena, en cambio, subió de 24 a 25”.

Tras asentir, con gestos de resignación, estos cuatro comerciantes de papa consultados recordaron que “antes de la subida del diésel la papa ya estaba cara, por la mala temporada de este año”.

En el mercado Iñaquito, en cambio, tres vendedoras de papa consultadas en la primera hora de hoy, señalaron que aún tenían el producto que compraron la semana anterior y reconocieron su preocupación por el alza que ya les han anticipado sus proveedores en las últimas horas.

Otros productos

Por esta escasez y variación en los precios, la papa es uno de los productos con impacto más visible tras el incremento del precio del diésel, que rige desde el sábado anterior. Sin embargo, no es el único.

Otros productos afectados, según puntualizaron los comerciantes entrevistados, son los racimos de verde, que no sólo se ofertaba en pequeñas cantidades en comparación con semanas anteriores, sino a 35 dólares, es decir con más de 8 y 10 dólares de diferencia, que antes del incremento del precio del combustible.

“Así nos entregan, ya alzado el producto. Ahora por lo del diésel es otro golpe al verde y no es nuestra culpa. Esto, además de que desde hace cuatro meses el verde ya estaba caro por los problemas de la plaga que tuvieron los productores”, comentó la comerciante Gloria Sisa.

Daly Salas fue más precisa al indicar que “para la venta al por menor cada unidad sale a 50 centavos”.

Los comerciantes consultados también puntualizaron que, a partir de esta semana, también han pagado más por cada quintal de col morada, que paso de entre 4 y 5 dólares a 8 y 10 dólares. El quintal de choclo de Bolívar también paso de 18 a 22 dólares; y la col de Machachi, de 15 a 17,50

Transporte

Jorge Sisa, comerciante ambateño que distribuye en su propio camión “mallas” de 10 kilos de ajo que adquiere a 14,50 y vende a 16 dólares a por lo menos 60 sitios en todo Quito, testimonió: “Todavía no sé cuánto me va a salir la tanqueada, de 33 dólares, que todavía me está aguantado. Pero de ley que me va a subir bastante, y el problema es que yo no puedo subir el producto de un día para otro. Simplemente me dejarían de comprar. Y así pierdo clientela y pierdo mi negocio”.

Quienes sí puntualizaron, con facturas en mano, el incremento de cada reabastecimiento de diésel de sus camiones fueron los cuatro transportistas de la cooperativa que opera desde el interior del mercado Mayorista.

Segundo Sumancela, por ejemplo, mostró los comprobantes entregados por las estaciones de servicio, ambos por 25 dólares, y comentó que “por años tranqueaba solo con 30, en el peor de los casos, con 33. Y ahora, con 50. Es un incremento gigante, muy duro. Y eso tenemos que hacerles comprender a nuestros clientes. Algunos menos mal sí han entendido, pero otros, en especial las compañías grandes, dicen que ya no nos van a contratar”.

Sumancela y los cuatro compañeros con los que esperaban clientes aprovecharon para quejarse que, a diferencia de los transportistas de pasajeros, “a nosotros nadie nos da ni un centavo de compensación”.

Por cuenta propia

Silva Celi comenta que para reducir los costos de transporte y obtener más ganancia, desde hace más de 10 años ella va personalmente a comprar guineos como “fruta en pie certificada”, es decir a productores agremiados en Los Ríos.

Sin embargo, dice resignada, “esto ya dejó de ser negocio, porque con el flete que subió, ahora traer todo el camión con fruta, incluido el flete, me cuesta 100 dólares más, porque subió de 300 a 400 dólares.

Los responsables municipales de la administración de los tres mercados visitados señalaron que sí se han realizado controles de precios por parte de personal de la Intendencia de Policía de Pichincha. Sin embargo, acotaron, salvo la indicación, con insistencia de la prohibición de “incrementos no autorizados”, no se ha aplicado sanciones ni se ha detenido a comerciantes.