Dos expertos en energía cuestionan la planificación de los horarios de cortes de luz sin considerar la necesidad de preservar la reserva del complejo Mazar, del que depende el 38% de la demanda nacional.
POR: Juan Camilo Escobar
El principal embalse del complejo Mazar, ubicado en el sur del país –que con sus tres centrales hidroeléctricas abastece el 38% de la demanda eléctrica nacional–, sigue alejándose de su meta de recuperar un nivel de agua de 2.125 metros sobre el nivel del mar, clave para enfrentar parcialmente la crisis de racionamiento eléctrico que comenzó el 18 de septiembre.
Esta mañana, tras cuatro días de descenso desde su último máximo de 2.115,99 metros sobre nivel del mar, registrado el 4 de noviembre, el nivel del embalse se situó en 2.114,24 metros sobre nivel del mar, según el reporte de “producción en línea” de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec).
Esta caída en el nivel de la represa coincide con la decisión de las autoridades de activar de manera intermitente una o ambas turbinas de la central Mazar, en lugar de mantenerlas apagadas como se había propuesto inicialmente para preservar las aguas del embalse. Entre el 25 de octubre y el 4 de noviembre, por ejemplo, con las dos turbinas apagadas en Mazar, el embalse pasó de 2.111,28 a 2.115,99 metros, una recuperación de apenas 4,71 metros, lejos de la meta de 2.125 metros, establecida como objetivo.
Este mediodía, con las dos turbinas de Mazar en funcionamiento, las ocho turbinas de la central Molino y las tres turbinas de la central Sopladora, el complejo Mazar producía 1.196,67 megavatios hora, el 68,1% de su capacidad. Esta operación hizo que la cota de Mazar se redujera aún más, alcanzando los 2.113,34 metros, es decir, a sólo 3,34 metros de su nivel crítico, en el que solo puede operar con una turbina, y a 15,34 metros de su nivel de inoperatividad total.
Frente a esta situación, los especialistas en energía Hugo Arcos, de la Escuela Politécnica Nacional, y Marco Acuña, del Colegio de Ingenieros Eléctricos de Pichincha, advirtieron que de continuar la caída en la disponibilidad energética, los apagones podrían ser más extensos, superando incluso la duración que distintos gremios profesionales habían sugerido técnicamente al inicio de la crisis energética. Dichas recomendaciones, señalaron, no fueron tomadas en cuenta.
Ambos expertos coincidieron en que la planificación de los cortes eléctricos debe fundamentarse en criterios técnicos y no políticos. Insistieron en que los programas de interrupciones deben basarse en datos sobre la disponibilidad real de reservas de energía en las principales centrales hidroeléctricas, así como en la capacidad efectiva de las termoeléctricas para aportar megavatios-hora al sistema nacional interconectado de electricidad.
Arcos enfatizó que las decisiones sobre la duración de los cortes no tienen una base técnica adecuada, y están, en cambio, sustentadas en previsiones de lluvias que resultan inexactas. “Puede llover en Cuenca, pero el nivel del embalse no aumenta significativamente. Sin embargo, sólo por esas precipitaciones se decide reducir los cortes”, afirmó.
Según Arcos, las decisiones basadas en pronósticos inciertos o condiciones pasajeras, como un solo día de lluvia con granizo, han limitado los racionamientos y se han reanudado las operaciones en Mazar hasta un punto de riesgo técnico. Esto afecta la recuperación de su embalse y perpetúa el “círculo vicioso” antitécnico que, a su juicio, se repite constantemente.
“Las consecuencias son lógicas: volver a un círculo vicioso de plantear cortes de 12 o 14 horas como una constante, con una semana de racionamientos de 6 horas en la que arruinamos el nivel del embalse, y la siguiente semana con racionamientos de 12. Y así pasaremos durante toda esta etapa de crisis, lo cual está cansando a la ciudadanía. Es preferible mantener horarios técnicamente establecidos, pero se hace todo lo contrario por un simple aguacero”, concluyó.
¿Cuáles son las previsiones climáticas?
Para este fin de semana en la zona de la Amazonía en la que se encuentra la represa hidroléctica Coca Codo Sinclair se espera un incremento de lluvias antes de toda una temporada seca que podría extenderse hasta fines de este mes, según el Instituto Nacional de Hidrología y Meteorología (Inamhi).
Estas previsiones se vuelven claves en el actual contexto de crisis energética en la que las autoridades necesitan planificar los horarios de racionamientos de acuerdo con las condiciones del clima que puedan influir en la capacidad de producción de las centrales hidroeléctricas, en especial en Coca Codo Sinclair, ubicada en la Amazonía, con una capacidad de 1.500 megavatios, y el complejo hidroeléctrico Mazar, con una capacidad de 1.756 megavatios.
Una mayor producción en Coca Codo Sinclair -a consecuencia de las recientes lluvias en la Amazonía- permitió al Gobierno reducir a seis horas los racionamientos programados para esta semana, menos de la mitad de las 14 horas de la semana anterior.
La decisión de aplicar este racionamiento prolongado, el mayor desde el inicio de la crisis, fue respaldada por el Consejo Consultivo de Ingenierías y Economía. El consejo justificó la medida como necesaria para recuperar la represa Mazar. Además, argumentaron que una forma de sostener este tipo de racionamientos es reducir la jornada laboral a seis horas diarias para ahorrar electricidad.
Por ahora, para el fin de semana en la zona de la Amazonía, donde opera la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair se esperan “eventos de precipitación más intensos con una distribución más amplia”, no solo para la región amazónica, sino también para parte de la Sierra.
“Sin embargo, desde la próxima semana, desde el martes o miércoles, los eventos de precipitación tienden a disminuir considerablemente. Es probable que tengamos un posicionamiento mucho más marcado y más fuerte de una masa mucho más seca, que va a impedir que se generen eventos de precipitación considerables. A su vez la nubosidad será más reducida y aumentará la temperatura y la radiación, que se extienda hasta el 20 y 23 de noviembre”, explicó el técnico del Inamhi, Javier Macas.
Te puede interesar:
. La desinformación también abre paso a la xenofobia
· Abad fue sancionada por campaña anticipada en redes sociales
. Las ventas del sector automotor caen a su nivel más bajo en cinco años