20.7 C
Ecuador
viernes, diciembre 5, 2025
spot_img

‘Rayos X’ de la juventud en Ecuador: así luce en temas políticos y en precariedad

El estudio “Juventudes: asignatura pendiente” de la Fundación Friedrich Ebert revela que la juventud ecuatoriana vive entre la precariedad laboral, la desconfianza institucional y el miedo a la violencia. Conoce más sobre las condiciones de este grupo en el país.

Más de seis millones de jóvenes de entre 15 y 35 años viven hoy en Ecuador. Según el informe “Juventudes: asignatura pendiente”, parte de un estudio regional de la Fundación Friedrich Ebert (FES) realizado junto con YouGov entre enero y febrero de 2024, este grupo enfrenta una crisis social marcada por el desempleo, la inseguridad, la desigualdad educativa y la pérdida de confianza en las instituciones.

El sondeo mostró que el 31,8 % de los jóvenes ecuatorianos tienen entre 18 y 35 años accede a un empleo adecuado, mientras el desempleo juvenil alcanza el 9,2%, más del doble del promedio nacional general (3,7%).

Entre quienes sí trabajan, solo el 15% tiene empleo estable, el 17% está en empleos temporales y el 34% realiza trabajos sin remuneración regular. Apenas el 38% de quienes trabajan recibe todos los beneficios de ley. Pero las mujeres son las más afectadas: su desempleo pasó del 10,9% al 12,8% entre 2023 y 2024, y la brecha de género en el acceso a empleos adecuados se mantiene.

El estudio advierte que la precariedad se agrava por las barreras educativas. Solo el 24% de los jóvenes accede a la educación superior y apenas el 5% de las clases bajas logró culminarla. El 66% alcanza la secundaria como máximo nivel educativo, mientras el 10% no pasa de la primaria. La FES identifica que las desigualdades de clase y género limitan las oportunidades y reproducen la exclusión estructural.Y esto forma parte de la realidad de los jóvenes en el país. 

En el plano económico y social, el 66% de los jóvenes dice estar poco o nada satisfecho con la situación del país y el 52% se declara insatisfecho con su economía personal. Las principales causas de malestar son el crimen organizado (53%), la inseguridad (49%), el consumo de drogas (44%) y la corrupción (31%). El 57 % de los encuestados manifestó que le gustaría emigrar, principalmente por razones económicas (60%), de falta de trabajo (51%) o por la violencia (35%).

El miedo se ha incorporado a la vida cotidiana y los datos de la encuesta también lo revelan. El 41% de los jóvenes de este rango dejó de ir a fiestas por la inseguridad, el 34% evita visitar zonas peligrosas, el 39% suspendió actividades culturales o deportivas y el 20% ya no asiste a mítines políticos. Aun así, el 86% de los jóvenes mantiene expectativas positivas sobre el futuro y cree que estará mejor o mucho mejor en los próximos cinco años.

Pero el contexto político también evidencia una fractura. En Ecuador, el 62 % de los jóvenes respaldaría un gobierno militar en caso de crisis, y casi la mitad aceptaría un régimen autoritario bajo ciertas circunstancias. El estudio advierte que esta tendencia se repite en varios países de la región, donde la insatisfacción con la democracia es generalizada.

En América Latina, entre el 58% y el 73% de las juventudes consideran a la democracia el mejor sistema político, pero menos del 40% se declara satisfecho con su funcionamiento.

Pese al desencanto, dos de cada tres jóvenes ecuatorianos siguen valorando la democracia como la mejor forma de gobierno, y el 65% considera que el voto sigue siendo una herramienta válida de cambio. Sin embargo, la confianza institucional es mínima: solo el 24% confía en el gobierno central, el 14% en la justicia, el 11% en la Asamblea Nacional y el 10% en los partidos políticos. Las Fuerzas Armadas (54%) y las universidades (32%) son las únicas instituciones con niveles relativamente altos de confianza.

En el ámbito privado, la familia sigue siendo el principal soporte emocional: 66% se declara satisfecho con sus relaciones familiares, y 44% con sus amistades. El refugio personal, señala el estudio, compensa en parte la desconfianza general hacia el Estado y las organizaciones colectivas.

Jóvenes en política

En términos de participación política, el 86% de los jóvenes ecuatorianos votó en las elecciones de octubre de 2023. Sin embargo, solo el 9% está afiliado a un partido y el 20% participó en campañas. Y su participación en protestas, según dicta el estudio, son escasas: apenas el 8 % marchó durante el último año, con mayor presencia en estratos altos (12%) frente a medios y bajos (7%); sobre todo por temas ambientales, feministas o de derechos juveniles. Quienes no lo hicieron mencionan temor a la represión (30%), miedo a enjuiciamientos (21%) o falta de tiempo (40%).

Siguiendo esta línea, el informe demuestra que el asociativismo juvenil es reducido pero no inexistente: 12% participa en organizaciones civiles o voluntariados, 18% en clubes deportivos y 12% en espacios religiosos. Aun así, 46% dice que le interesaría involucrarse más en actividades comunitarias. Las principales causas que los motivan son el medio ambiente y la defensa de territorios (19%), los derechos de las juventudes (20%) y los derechos de género y feminismos (9%).

En la dimensión ideológica, la juventud ecuatoriana mantiene posturas mixtas: 85% apoya la gratuidad de la educación y la salud, 72% respalda mayores impuestos a los más ricos y 85% prioriza el medio ambiente. Al mismo tiempo, 54% considera que las mujeres son más aptas para cuidar y 41% valida los piropos en la calle.

Por otro lado, en cuanto a la relación con el Estado, el 71% de los jóvenes considera que el Gobierno no representa sus intereses, y el 83% percibe altos niveles de corrupción institucional. Las instituciones con menor credibilidad son la justicia (14 %), la Policía Nacional (28 %) y los partidos políticos (10 %). Apenas un 24% confía en el gobierno central, lo que sitúa a Ecuador entre los países de la región con menor confianza política juvenil, junto con Bolivia y Perú, donde los niveles de desafección superan el 75%.

El miedo a la violencia atraviesa la vida cotidiana de los jóvenes ecuatorianos. Ocho de cada diez afirmaron haber modificado sus rutinas por temor a la inseguridad. El 46% dijo que alguien cercano fue víctima de un delito el último año, y el 19% sufrió directamente un asalto o amenaza. Para el 36%, el narcotráfico es la principal causa de violencia, seguido del desempleo juvenil (24%) y la corrupción policial (18%). En este contexto, el 20% dejó de asistir a manifestaciones o eventos públicos por miedo a represalias, una tendencia más pronunciada que el promedio regional (12%).

El estudio también explora las percepciones sobre género y diversidad, donde persisten actitudes conservadoras. Aunque el 85% apoya la igualdad formal entre hombres y mujeres, solo el 33 % respalda el derecho al aborto y el 28% aprueba el matrimonio igualitario. Más de la mitad (59%) cree que los hombres deben ser los principales proveedores del hogar, el 41% considera aceptables los piropos callejeros y el 44% opina que las mujeres “exageran al denunciar acoso”. La FES advierte que estas opiniones evidencian la permanencia de estereotipos de género, sobre todo entre los jóvenes de zonas rurales y niveles educativos más bajos.

En el plano informativo, los jóvenes ecuatorianos se alejan de los medios tradicionales. El 78% se informa sobre política en redes sociales, principalmente a través de TikTok (39%), Instagram (32%) y Facebook (27%). Solo el 12% confía en los medios convencionales televisión, prensa o radio, aunque el 63% reconoce que la información política que circula en redes “es manipulada o parcial”. Este comportamiento, según el informe, refleja un cambio profundo en los canales de socialización política y en la manera en que los jóvenes construyen su visión del país.

A través de estos resultados, FES advierte que las juventudes ecuatorianas “no son apáticas ni despolitizadas”, sino que transforman las formas de acción: prefieren los espacios digitales, el activismo cultural y las expresiones comunitarias antes que los canales institucionales. Su desafío, señala el informe, es ser reconocidas como actores clave de cambio en una democracia que las escuche y las incluya.

artículos relacionados

Mantente conectado

19,000FansMe gusta
8,136SeguidoresSeguir
42,708SeguidoresSeguir

chequea