La crisis sanitaria mundial generada por el COVID19 no se limita a las 113.579 personas contagiadas, las 3.995 muertes registradas por este virus hasta las 14:20 del 09 de marzo del 2020. Tampoco a los millonarios recursos invertidos por los gobiernos de 105 países distintos, en particular China que recoge el 85% de diagnósticos donde se registran más de 62.000 ciudadanos curados, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En medio de esta realidad, se reporta una caída de aproximadamente el 30% en los precios del crudo internacional. La situación se presenta tras una falta de acuerdo entre Arabia Saudita, máximo exportador en el Medio Oriente, y Rusia. Arabia anunció el pasado 6 de marzo la reducción de sus precios de venta oficiales y planes para un aumento drástico de la producción a partir del 01 de abril. Estas declaraciones dieron pie a una “batalla”.
La situación que atraviesa el gigante asiático remece la estructura económica mundial. El petróleo se ha convertido en la muestra más palpable. Este 09 de marzo el barril de West Texas Intermediate (WTI) registró un precio de USD 29,78, el más bajo desde el 17 de enero de 1991 cuando las tropas multinacionales, autorizadas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y encabezadas por Estados Unidos comenzaron un ataque contra Irak desde el Golfo Pérsico.
El crudo WTI, producido en Estados Unidos, es considerado de mayor calidad debido a que su concentración de azufre es más baja y esto le permite ser refinado más fácilmente. Esta característica hace que sea referencia al fijar los precios del mercado internacional, eso incluye a Ecuador.
Desde 2007, en el país los valores más bajos se registraron en enero y febrero de 2016 cuando se situó en USD 31,46 y USD 30,33, respectivamente. De acuerdo al Banco Central del Ecuador (BCE), en su documento sobre precios promedio del crudo ecuatoriano e internacional, «en febrero de 2016, se ubicó en un precio promedio ponderado de USD/b 24.98 y USD/b 16.38 para los crudos Oriente y Napo, en su orden». El precio de este producto ecuatoriano es, en promedio, inferior en USD 10 en relación a los explotados en el extranjero. Por ende, el Gobierno puede obtener USD 19 por barril de crudo actualmente.
La Presidencia aseguró en 2017 que al Estado le cuesta, en promedio, USD 39,4 producir un barril de petróleo. Esto significa que para generar ingresos se necesitan precios superiores, caso contrario solo alcanza para cubrir la producción. Con precios por debajo de las USD 20, como los registrados en marzo de 2020, Ecuador debe invertir cerca de USD 20 más por barril.
En 2020 el presupuesto general del Estado fue programado con un precio promedio de USD 53,10. Actualmente, esta cifra se encuentra en USD 23.32 por debajo de lo planeado. El pasado 4 de marzo el Ministerio de Economía y Finanzas aseguró que se dejarán de percibir cerca de USD 80 millones al año por cada dólar menos en el valor calculado en la proforma. Sin embargo, este es solo un cálculo preliminar de la afectación que dejará la crisis del COVID 19, los volátiles precios del petróleo continuarán marcando el ritmo de la economía ecuatoriana.



