La primera audiencia pública se llevará a cabo el próximo lunes. ¿Qué caso elevó la discusión a nivel nacional? ¿Es el único? ¿Qué se está planteando en la demanda que resolverá la corte? Todo lo que debes saber sobre este hecho histórico.
En un hecho histórico para Ecuador: la Corte Constitucional ha anunciado que examinará, por primera vez en el país, una solicitud de legalización de la eutanasia. La audiencia pública para iniciar el tratamiento de este caso está prevista para el próximo lunes, de manera telemática, según un comunicado de la corte. La convocatoria se confirmó hoy.
Por ahora, se mantiene un interés por el tema en el país y a escala internacional, en medio de pronunciamientos públicos de respaldo al pedido de Roldán por parte de organizaciones de diferentes países, las cuales han recordado que en América Latina sólo Colombia despenalizó la eutanasia en 1997; Uruguay y Chile están debatiendo, actualmente, proyectos similares: y México, en cambio, cuenta con una alternativa conocida como la ley del ‘buen morir’, que permite a pacientes con enfermedades incurables o a sus familiares solicitar la no prolongación de la vida por medios artificiales.
La solicitud la presentó Paola Roldán, una mujer de 42 años afectada por esclerosis lateral amiotrófica (ELA), con un 95% de discapacidad que la ha dejado postrada. La delicada y difícil situación de salud que enfrenta impidió la mañana de hoy a Roldán atender un llamado de Ecuador Chequea.
EL PEDIDO
El abogado que patrocina este pedido, Farith Simon, lo tiene muy claro. En recientes declaraciones públicas el jurista ha descrito la situación de la paciente, reiterando que la ELA ha dejado a Roldán con un 95% de discapacidad y pérdida total de control sobre sus músculos voluntarios, dependiendo de un respirador para sobrevivir, con la excepción de los músculos faciales.
El pedido de Roldán para acceder a la eutanasia consiste en que se declare inconstitucional el artículo 144 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) que establece, sin ningún tipo de excepciones, penas de cárcel contra una persona que quite la vida a otra; bajo el argumento que dicha norma no incluye, precisamente, una excepción para quien brinde asistencia para una muerte digna o un buen morir.
Dicho argumento consta en el texto de la demanda, de 44 páginas, que los abogados que patrocinan a Roldán presentaron a la Corte Constitucional. Dada la excepcionalidad de este caso, el organismo decidió adelantar la convocatoria a una primera audiencia —en la que se resolvería el inicio propiamente dicho de este caso— sin esperar el orden cronológico de ingreso de la solicitud, frente a otras demandas presentadas antes.
El catedrático constitucionalista André Benavides explicó que el trámite solicitado se enmarca en lo que en términos jurídicos se conoce como “sentencia aditiva”. Esta figura, explicó, permite a la Corte declarar la inconstitucionalidad de un artículo de una norma con fallas —en este caso el 144 del COIP— y, al mismo tiempo, restablecerlo, de manera automática, pero esta vez enmendado la falla legal, que en este mismo caso sería la falta de la mencionada excepción.
“Se pretende incluir en el mismo texto una ‘excusa legal absolutoria’, tal como ocurre en el caso de la despenalización del aborto por violación, para que aquellos médicos que practican este tipo de procedimientos no sean sancionados”, dijo, tras insistir que se mantiene “el tipo pena”, es decir la sanción por quitar la vida a otra persona.
“Se puede declarar inconstitucionalidad del artículo sin expulsarlo del ordenamiento jurídico, sino que se declara la inconstitucional, se enmienda ese defecto incluyendo la excepción de la muerte asistida. Y se puede hacer mediante sentencia directa, sin necesidad de la Asamblea Nacional”, indicó.
NUEVA LEY
Fernando Sacto, exconsultor de salud pública de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y director de la Escuela de Salud de la Universidad Internacional, calificó como indispensable, pero no suficiente que la Corte Constitucional “siente un precedente” sobre la despenalización de la eutanasia; pero que, de manera posterior, se debe crear una ley específica que regule de manera clara cómo los profesionales de la salud deben practicarla.
“Que se aplique para aquellas situaciones de orden médico en las cuales ya la medicina no ofrece una mínima condición de vida saludable. Que quede claramente establecido, sin lugar a dudas, para que esto sea un avance en casos de prolongar la vida en una situación casi vegetativa”, comentó.
“Tiene que existir un ordenamiento legal lo más claro posible y reglamentado, para lo cual podría realizarse un análisis comparado de legislación existente en otros países para aprovechar experiencias, porque no hay nada nuevo bajo el sol”.
VIDA SIN VIDA
Consultado sobre el debate que se ha abierto sobre este tema, el médico especialista en políticas públicas de salud y docente de la universidad UTE, Daniel Simancas, declaró su satisfacción de que el país empiece a discutir sobre este tema, a propósito de la visibilidad nacional e internacional que ha tenido el pedido de Roldán.
Sin embargo, dijo, hay muchísimos casos que no se conocen de familias que se encuentran literalmente destrozadas, agotadas físicamente y afectadas psicológicamente frente a la situación de seres queridos que no tienen esperanzas de vida y que sufren dolores que no se pueden controlar por enfermedades catastróficas, degenerativas, que no dejan de progresar en el cuerpo como, por ejemplo, el mieloma múltiple avanzado, la esclerosis múltiple y el cáncer terminal.
Se trata, indicó, de un tema pendiente, del que la sociedad ecuatoriana se ha negado sistemáticamente a hablar y que sigue necesitando una respuesta, para la cual se requiere escuchar el criterio de abogados, científicos y, sobre todo, de los médicos que han sufrido, junto con los pacientes, la desesperación y el agotamiento de todos sus familiares.
«Lo digo categóricamente: la perspectiva del médico, del salubrista, es fundamental para construir el debate y superar el juego de convencernos los unos a los otros de si está bien o mal. Esto está por encima del bien y el mal porque rasga la dignidad de una persona», dijo
También comentó que ha sido testigo de numerosos casos en que médicos se han sentido desbordados humana y profesionalmente cuando pacientes que ya no tienen esperanzas de vida suplican, dentro de sus creencias y espiritualidad, «a que llegue el final de sus días. Esto es algo innombrable”.
«Es una tortura mantener con vida a un cuerpo sin mente. Es una tortura a la que se somete a un paciente alimentado sólo con líquidos a través de sondas, conectado a una máquina para filtrar su orina y con un montón de medicamentes y drogas para que su corazón pueda bomberar, para que su sangre quiera colbarar con la lucha contra las infecciones y conectado a un respirador porque su cuerpo no puede funcionar por sí solo. Este es tuema del que no se quiere hablar por cuestiones legales y lo legal es imporcedente para las causas y propópsitos finales que tiene la eutanasia de suicidio asistido y muerte digna», acotó.
Te puede interesar:
· Se consolida acuerdo para elegir autoridades de la Asamblea
· Posesión del correísmo, $1,3 millones; la de Noboa, $600 mil
· Kaviedes habría dicho que ahora quisiera que el policía que lo detuvo lo empujara