Los transportistas han identificado las siete vías más peligrosas del país. Pese a los 1139 operativos que el Gobierno dice que ha realizado durante la última semana, los viajes siguen llenos de temor. Asaltos agresivos, pérdidas y hasta daños materiales son parte de los testimonios en muchos sectores.
En varias ocasiones y tras amenazas de paralización e incluso bloqueos de algunas vías, los gobiernos de Guillermo Lasso y Daniel Noboa se han comprometido con los principales dirigentes del sector transporte a atender sus pedidos de enfrentar los asaltos, extorsiones y secuestros de los que son objeto cada día en las principales vías interprovinciales del país.
Así, en octubre del 2023, los transportistas, cansados de la inseguridad, decidieron alzar sus voces y bloquear algunos tramos de la Panamericana norte, entre Imbabura y Carchi. El 30 de ese mes los compromisos se sellaron con apretones de manos y fotos junto a los ministros de turno. Pero, a pesar de las promesas, el 9 de julio anterior, se repitió la escena con la amenaza de los transportistas de “apagado de motores”. Los mismos compromisos, las mismas fotos.
¿Resultados? Transportistas consultados hoy por Ecuador Chequea contaron que mientras esperan que alguna vez las promesas se conviertan en realidad, ellos continúan su trabajo con la sombra de la delincuencia acechándolos.
La sensación de inseguridad sigue presente en cada kilómetro recorrido al anochecer, lamentaron conductores de camiones entrevistados en el tramo de acceso, desde el norte de Quito, a la Vía alterna a la Costa. En la terminal terrestre de Carcelén, en el norte de Quito, los conductores de cuatro compañías que cubren rutas hacia la Costa, también narraron su día a día con resignación. El temor es un «pasajero constante», lamentan.
¿Hay operativos policiales y militares en las vías interprovinciales? La respuesta es un rotundo no.
¿Hay custodia de tráileres o buses interprovinciales, incluso con sistemas de «postas» de patrulleros policiales, que ofrecieron este y el anterior gobierno? No, vuelven a responder transportistas de las compañías Aero Taxi, Trans Esmeraldas, Ecuador y Andina, quienes todos los días trasladan pasajeros desde Carcelén hacia Santo Domingo, Quevedo, Guayaquil y otros destinos de la Costa.
Un transportista, que prefiere no decir su nombre por temor, cuenta que después de ser víctimas de un violento asalto a mano armada, que dejó heridos a su compañero conductor y a varios pasajeros, vieron, en la misma carretera, los cuerpos de dos conductores de camiones asesinados, tendidos en el pavimento. La imagen de los cuerpos inmóviles bajo las luces intermitentes quedó grabada en su mente.
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«Salen con fusiles, ametralladoras. Son unos 20 o 30 que salen, no uno o dos. Son bastantes. Cierran el paso con motos, con troncos, con otros autos. Disparan a matar al conductor para que uno detenga la marcha del vehículo y proceden a subirse. Ya no estamos hablando de un simple asalto, esto ya es contra la vida del conductor», relató.
Este conductor cuenta que él y sus compañeros de volante no dejan de denunciar cada nuevo hecho de violencia en sus redes sociales, a tal punto que ya se conoce de memoria los puntos más críticos: el bypass de Quevedo, toda la vía hacia El Empalme, los tramos Bucay – La Troncal, Machala – Huaquillas, Naranjal – Ponce Enríquez.
«En las redes sociales mismo sale a diario cómo estamos con los asaltos, pero ya se nos ha vuelto prácticamente una costumbre. Y uno antes de salir de viaje debe encomendarse a Dios y que nos lleve con bien a todos los pasajeros», añadió.
No es un caso aislado. Otros tres conductores, que también pidieron la reserva de su nombre e incluso pidieron que no se identifique ni a las compañías que laboran ni a los buses que diariamente conducen, dieron más detalles de la inseguridad en la vías identificadas como las más peligrosas. Así, insistieron en que son muy eventuales los patrullajes policiales y los convoys de buses interprovinciales que dependen del propio tiempo y organización de los transportistas, sin apoyo alguno de las autoridades.
Situación mejor
En contraste, cuatro conductores de buses que cubren rutas entre Quito, Otavalo, Ibarra y Tulcán indicaron que en meses recientes no han tenido mayores novedades en materia de inseguridad en la Panamericana Norte.
Báez manifestó: “Lo que es Imbabura-Quito no podríamos quejarnos de la vía, que están en buen estado y últimamente no han habido casos graves de inseguridad. Lo que sí, el problema es con el transporte que tenemos desde Guayaquil hacia Ambato, en el sector de El Triunfo es una ‘situación candela’, que da miedo. Nos han perseguido, pero no más de eso. Pero a otros compañeros sí les han disparado, asaltado y robado”.
En medio de tantos reclamos y exigencias de que las autoridades atiendan sus pedidos de seguridad en las vías, los transportistas no dudan en reconocer que, aunque sea de manera temporal, sí se redujeron los asaltos mientras se realizaban los operativos policiales y militares masivos en las vías cuando empezó el Estado de Excepción, a inicios de este año.
¿Y los pasajeros?
Siete pasajeros consultados por Ecuador Chequea hoy en la terminal de Carcelén, en el norte de Quito, aseveraron que, aunque no han sido víctimas de la delincuencia en sus viajes frecuentes entre Quito, la Costa y el norte del país, sí les preocupa la inseguridad en las vías.
Dos de los consultados indicaron que algunos conocidos y familiares sí han sido víctimas de la delincuencia al trasladarse a la Costa. Por tanto, dijeron, es necesario que haya controles “de verdad”.
Cuatro de los consultados indicaron que, dada esta preocupación, han decidido no viajar en horas de la noche, con excepción de casos de extrema urgencia.
“Es indispensable que el Gobierno, la Policía, todos garanticemos la seguridad para que podamos viajar tranquilos. Caso contrario, así no podremos seguir viajando y ahí sí se paraliza el país, la producción, todo lo que hacemos a diario, ya sea aquí o allá”, expresó Sonia Quinto, mientras esperaba el bus para trasladarse a Guayaquil.
UNA CARGA PESADA
“A mí no me ha pasado, menos mal, pero sí he escuchado casos de otros compañeros. Es algo que preocupa mucho y por eso las autoridades deben intervenir”, comentó Daniel Chicaiza, conductor desde hace dos años de un furgón de transporte de alimentos en Santo Domingo.
Mientras llenaba de combustible el furgón de carga de una fábrica de pinturas en la gasolinera de la vía hacia La Mitad del Mundo, primer tramo previo de acceso a la vía a la Costa, el conductor Luis Oña comentó: “Ya no se puede circular como hace un par de años. Hay muchos asaltos en las vías. A nosotros nos han asaltado por la vía a Quevedo. Ahí asaltan a mano armada, poniendo palos con clavos en la vía. Nosotros hemos tenido que evadir, dañando los carros. Y la Policía no asoma y, si asoma, es cuando ya pasó todo”.
CONTRASTE
Los testimonios de los transportistas contrastan con el pronunciamiento oficial emitido este lunes por el Ministerio de Gobierno, en el marco de una mesa técnica de seguridad con los transportistas, de que se han realizado 1139 operativos viales durante la última semana.
Consultada sobre la situación en las vías, la Federación de Transporte Pesado del Ecuador respondió que ha identificado las siete vías de provincias de mayor peligrosidad:
- Santo Domingo – Quito
- Cajas – Ibarra – Tulcán
- Guayaquil – Machala
- Guayaquil – Cuenca
- Guayaquil – Riobamba
- Lago Agrio – Coca – Loreto
- Baeza – Quito
Así, en la Costa, según el mismo gremio, los tramos más peligrosos, donde se cometen asaltos armados a los tráileres de transporte de mercadería, son los siguientes:
- El Bypass de Quevedo
- Quevedo – Santo Domingo
- Balzar – Salitre
- La vía de la Península
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