Las exportaciones no petroleras y no mineras de Ecuador crecieron un 16% en 2024, alcanzando los $24.849 millones y logrando un superávit comercial histórico. Sin embargo, la falta de un Tratado de Libre Comercio con EE.UU. y la incertidumbre electoral generan preocupación.
POR: Juan Camilo Escobar
Tras un 2024 de crecimiento sostenido, con un aumento del 16% en las exportaciones no petroleras ni mineras, que alcanzaron los 24.849 millones de dólares, el gremio del sector exportador ecuatoriano enfrenta el 2025 con incertidumbre. Según advierten sus representantes, este año traerá “grandes desafíos” y, sobre todo, escaso optimismo respecto a que Ecuador sea incluido en la lista de países con los que Estados Unidos negociará un Tratado de Libre Comercio.
Se trata de una incertidumbre que responde a dos frentes, uno externo y otro interno. En el ámbito internacional, el panorama depende en gran medida de las decisiones de Washington: la segunda administración de Donald Trump prevé seleccionar y anunciar en abril la lista de países con los que negociará tratados de libre comercio, una decisión que podría redefinir la relación comercial entre Ecuador y Estados Unidos.
A nivel nacional, la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, prevista para el 13 de abril, y la toma de posesión del nuevo gobierno o la continuidad del actual, el 24 de mayo, serán determinantes para definir si se impulsan nuevas negociaciones y acuerdos comerciales, incluido uno con Estados Unidos, histórico principal socio comercial de Ecuador.
Estos dos factores políticos tanto en Ecuador como en Estados Unidos están estrechamente relacionados explicaron el presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), Felipe Rivadeneira, y el vicepresidente del gremio, Xavier Rosero, al presentar hoy el balance del sector exportador en 2024 y las perspectivas para el 2025.
Rivadeneira expresó su preocupación por la postura del gobierno estadounidense, que espera conocer los resultados de la segunda vuelta presidencial en Ecuador para tener claridad sobre su futuro político y comercial: «el hecho de que haya una segunda vuelta ha frenado, de alguna manera, lo que se había avanzado con Estados Unidos. El gobierno ecuatoriano está tratando de hacer los acercamientos, pero también hay una postura de Estados Unidos de esperar a ver qué pasa en las elecciones», comentó.
Además, el presidente de Fedexpor señaló que la candidata del correísmo ha adoptado una postura ambigua respecto a la necesidad de ese acuerdo, lo que, según él, representa una «alternativa peligrosa para las relaciones con Estados Unidos». “No responde con la posibilidad de un acuerdo comercial con Estados Unidos. Eso también genera preocupación en la administración Trump”, agregó.
LO QUE ESTÁ EN JUEGO
En medio de esta incertidumbre, las cifras muestran lo que está en juego: en 2024, las exportaciones no petroleras y no mineras a Estados Unidos alcanzaron 4.584 millones de dólares, lo que representó el 20,8% del total de envíos al exterior, según datos del Banco Central citados por Ribadeneira.
Además, sin un acuerdo comercial, explicaron los representantes exportadores, Ecuador no sólo pierde $285 millones cada año en exportaciones, sino que también se ve impedido de reducir los aranceles para el ingreso de productos ecuatorianos al mercado estadounidense, los cuales en 2024 fueron de $88,4 millones.
LOS PRINCIPALES DESTINOS
En este contexto, Estados Unidos ocupó el segundo lugar entre los destinos de las exportaciones ecuatorianas en 2024, según las cifras de los principales mercados de exportación levantadas por Fedexpor:
- Unión Europea:
25%, con exportaciones por 5.513 millones de dólares, un aumento del 38% respecto a 2023.
- Estados Unidos:
21%, con exportaciones por 4.584 millones de dólares, un incremento del 15% respecto a 2023.
- China:
17%, con exportaciones por 3.731 millones de dólares, una disminución del 14% en comparación con 2023.
- Comunidad Andina:
6%, con exportaciones por 1.278 millones de dólares, un aumento del 11% en relación con 2023.
En 2024, las exportaciones de Ecuador alcanzaron los 24.849 millones de dólares, lo que permitió al país registrar un superávit comercial histórico de 6.678 millones de dólares, el más alto en los 25 años de vigencia de la dolarización. En contraste, las importaciones disminuyeron un 5% en comparación con el año anterior, debido a “una menor demanda interna”, según Fedexpor.
En los últimos diez años, las exportaciones ecuatorianas han mantenido un crecimiento consistente, con aumentos anuales. En 2021, por ejemplo, el total de exportaciones superó los 15.969 millones de dólares, lo que marcó un hito en la recuperación post-pandemia tras los 13.981 millones registrados en 2020. Además, en 2024 registró uno de los incrementos más significativos, sólo comparable con el salto de 13.247 millones en 2019 a 15.969 millones en 2021.
A pesar de este balance positivo, los representantes del gremio exportador advirtieron que Ecuador no está en condiciones de competir con sus vecinos Perú y Colombia, cuyas exportaciones están respaldadas en un 90% por acuerdos comerciales. Señalaron que mientras esos países duplicaron sus exportaciones en un período de seis a ocho años, Ecuador tardó una década en lograr el mismo crecimiento.
Gran parte de este crecimiento en las exportaciones corresponde a los productos agrícolas e industriales, que aumentaron un 33%, al pasar de 7.753 millones de dólares en 2023 a 10.313 millones en 2024. Este incremento representó un aumento de 2.559 millones de dólares en divisas. Entre los principales factores que explican este crecimiento se destacan los precios históricos del cacao y una mayor demanda de frutas.
EL CACAO IMPULSÓ LAS EXPORTACIONES
Rosero explicó que los precios extraordinarios del cacao se deben, en gran parte, a «los problemas climáticos en los principales productores, Costa de Marfil y Ghana, lo que generó una escasez de oferta a nivel global y aumentó la demanda».
Además, destacó que la política implementada por Ecuador para expandir los cultivos de cacao, incluida la inversión extranjera, ha permitido aprovechar este aumento de precios, «no necesariamente esperado ni controlado». Rosero señaló que, aunque el precio es incierto, lo que Ecuador puede controlar es la expansión de la capacidad productiva, con incrementos récord en tonelaje. «La expectativa es pasar de 350.000 a 400.000 toneladas en 2024, a por lo menos 500.000 toneladas este año y mejor rendimiento y productividad por hectárea», afirmó.
LO QUE VIENE
Para 2025, el gremio exportador proyecta un crecimiento moderado en las exportaciones no petroleras ni mineras, con un aumento del 3% en volumen y un incremento de «un solo dígito en valor», del 4%.
Rosero, señaló que esta es una «expectativa mucho más moderada y conservadora», debido a las «volatilidades e incertidumbres» asociadas a las elecciones en Ecuador, que podrían generar un cambio en el modelo político y en la relación con el sector privado, lo que genera preocupación.
Agregó que no sólo Ecuador enfrenta procesos electorales, sino también países clave como Alemania, Francia y Reino Unido. Esta situación, indicó, suele retrasar decisiones relacionadas con el consumo y, como consecuencia, desacelera la demanda internacional de los productos que Ecuador exporta habitualmente.
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