Luego que el presidente Noboa reconociera que esta “mega cárcel” opera con solo 40% de su construcción, especialistas advierten tres tipos de riesgos de seguridad,transparencia y derechos humanos.
Expertos en seguridad y en temas penitenciarios advirtieron sobre graves riesgos de seguridad, transparencia y derechos humanos, tras la apertura de la Cárcel del Encuentro, en Santa Elena. “La cárcel no está al 100%, pero ya está al 35%, 40% y en dos semanas estará al 80% y se finalizará, el último pabellón, la última cosa, en un mes”, dijo el presidente Daniel Noboa, en una entrevista en Radio Sucre
Esta revelación provoca análisis y preocupaciones de exfuncionarios y especialistas, quienes sostienen que la decisión de inaugurar una prisión inconclusa contradice los estándares básicos de seguridad y gestión penitenciaria.
“Es una incoherencia inaugurar una cárcel de máxima seguridad cuando solo está construida al 40%. Si no se garantiza la infraestructura ni los procesos adecuados, no se puede hablar de máxima seguridad”, dijo Mario Carrillo, exdirector del Centro de Privación de Libertad de Cotopaxi y exsubdirector general del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores, SNAI.
Carrillo señaló que el sistema penitenciario continúa operando sin planificación estratégica, con respuestas reactivas ante la crisis. “Sin justicia eficiente, personal penitenciario capacitado y un plan de rehabilitación real, se repetirán los mismos errores”, advirtió.
La experta en temas carcelarios, Alexandra Zumárraga, coincidió en que una cárcel incompleta compromete la seguridad de internos y custodios. “Si las instalaciones eléctricas, los sistemas de cámaras o los escáneres no están completos, la seguridad se ve comprometida. Estamos hablando de las 300 personas más peligrosas del país”, señaló.
Zumárraga recordó que en prisiones nuevas, como las de Cotopaxi y Turi, ya se registraron fugas tras su inauguración por fallas operativas. “Primero se deben terminar las instalaciones y luego realizar los traslados. De lo contrario, se corre el riesgo de fugas o de incidentes graves”, agregó.
Frente a esta situación, la experta en seguridad Lorena Piedra advirtió que operar una cárcel inconclusa podría generar vulnerabilidades en sus sistemas de control y administración. Trasladar personas privadas de la libertad a una infraestructura incompleta “abre la puerta a fallas de seguridad” y a posibles irregularidades en el ingreso de personal o materiales, dijo en entrevista con BN Periodismo.
Piedra subrayó que el principal riesgo no se limita al estado físico del edificio. “La parte administrativa me parece mucho más compleja, más allá del propio hecho de la construcción de la cárcel”, afirmó, y cuestionó la falta de información pública sobre los protocolos internos del nuevo centro.
Poca información desde el gobierno
La cárcel del Encuentro fue presentada como uno de los proyectos emblemáticos del Gobierno para reducir el hacinamiento y reforzar la seguridad penitenciaria. Sin embargo, el Ministerio del Interior no ha informado oficialmente cuándo estará completada la obra ni qué sistemas de control se están aplicando.
De hecho, el titular de este último, John Reimberg, pese a insistentes preguntas en una entrevista exclusiva con Ecuavisa sobre el porcentaje de avance de la construcción, no respondió y se limitó a señalar que ya “tiene todas las seguridades necesarias y hemos trasladado a los más peligrosos delincuentes”.
No obstante aclaró que “obviamente habrá que revisar si puede haber algún problema en algo”.
El lunes 10 de noviembre, el gobierno de Daniel Noboa publicó en X fotografías de los presos rapados la cabeza, con el mismo estilo que lo ha hecho el presidente de El Salvador, Nayib Bukele. Además, aseguró que es una “obra tangible que marca un antes y un después en el país”.
Según informó Reimberg a Ecuavisa, para la seguridad de esta cárcel se podría contratar a policías y militares retirados en reemplazo de los agentes del SNAI.



