Con muchos menos inconvenientes que en intentos anteriores, el sistema de transporte más moderno del país inició operaciones. Usuarios resaltan su rapidez y hasta hubo el primer intento de robo, que fue neutralizado por la Policía.
POR: Karen Mantilla Ulloa
En los largos vagones del tren, los asientos ya no están vacíos, hoy están llenos. Dentro de ellos, ahora, hay ciudadanos que se transportan a sus lugares de trabajo, citas médicas, a visitar a sus familiares. Y otros sólo quisieron medir el tiempo que les tomaba ir de un lugar a otro.
Dentro del Metro de Quito, a los usuarios se les escucha decir: “¡qué rápido!”, “sólo 13 minutos de Quitumbe a La Magdalena”, “¡qué hermoso!”.
A un lado, están dos mujeres, una frente a la otra; ambas sacan sus cosmetiqueras y empiezan a hacer lo que hoy será su rutina de belleza. Ambas empezaron desde cero, desde la estación Quitumbe, donde tomaron el Metro. Se pusieron base, polvo, rímel, sombras y rubor; se demoraron 20 minutos hasta llegar a su parada, ‘La Carolina’. Entre risas, una de ellas dijo que hacer eso en el Trole o la Ecovía hubiese sido imposible. Se levantan y se van.
Dos mujeres se maquillan mientras van en el Metro.
Es que para los quiteños hoy no es viernes común. Luego de cinco administraciones municipales, muchos aplazamientos y hasta algunas inauguraciones fallidas, el Metro es una realidad. Hoy, de manera ininterrumpida, desde las 05:00 hasta las 23:00, sus 18 trenes empezaron a funcionar a lo largo de 15 estaciones, desde el sur, en Quitumbe, hasta El Labrador, en el norte.
Los títeres alegraron a los usuarios
“Hola, bienvenido al Metro de Quito, es un placer tenerte aquí”, se escucha decir a un títere, que es manejado por una agente de Control Metropolitano. Es que, varias entidades municipales quisieron hacer de este un “día especial”. Los agentes se encargan de amenizar el ambiente de velocidad que se vive, saludaban a todos sin excepción y los más de 50 pasajeros en la estación sonríen, se toman fotos y les abrazan. Los niños que van a la escuela se detienen para darles la mano.
“Estos actos son para aplaudir, venía corriendo y apurada para trasladarme a mi trabajo. Pero ver a los muñecos te calma y te saca una sonrisa y te hace olvidar que vas rápido”, dice Ana Lucía Reyes.
Los títeres alegraron a los usuarios, por momentos ellos eran el centro de atención.
La primera usuaria
Fueron los primeros usuarios en llegar a cualquiera de las estaciones quienes podían cortar la cinta de inauguración. Una de ellas fue Gladys Villega, que madrugó hasta la estación Quitumbe. No lo hizo sola, estuvo acompañada de su familia y vecinos. Querían conocer y vivir la experiencia de viajar en los vagones del tren.
Dice que al cortar el listón su corazón se emocionó. “Gracias al Metro, ahora podemos aprovechar al máximo el tiempo con nuestras familias. El tiempo nunca se recupera y ahora que es un hecho, el tiempo ahora nunca más será una excusa”.
Villega dice que está en todos los que se suban a los trenes cuidarlos y estar vigilantes a cualquier mala acción. “El Metro es para cuidarlo, no para destruirlo”, asegura.
Gladys Villega, junto con un pedazo de listón.
Para muchos de los usuarios, este viaje fue el primero; por eso, decidieron ir en grupo. Es el caso de Emma Conde y Carmen García, amigas y vecinas por más de 10 años, ambas de la tercera edad. Quieren sacar su ‘Tarjeta ciudad’, uno de los mecanismos de pago para utilizar el Metro de Quito.
Ellas viven en el norte de la ciudad, pero están en Quitumbe, porque un trabajador del Metro, les dijo que aún no abrían. Se demoraron 30 minutos en llegar y otros 30 en regresar a El Labrador, las dos van conversando, se toman fotos para enviárselas a sus hijos. Enma saca su celular y se toman una ‘selfie’.
Una vez en la estación El Labrador, las dos se toman de la mano y caminan a paso acelerado, quieren su tarjeta, hoy no importa nada más. Hay que subir las gradas eléctricas para estar en la primera planta, donde están los cajeros. Se sorprenden al ver a más de 50 personas en distintas filas.
Mientras la fila avanza, los trabajadores intentan atender las molestias en algunos de los usuarios, pues no tenían información para retirar su tarjeta, ya que antes había que registrarse en la página web del Metro de Quito.
Luego de 13 minutos, es turno de estas dos amigas. Enma, lo hace muy fácil, Carmen no tenía un correo electrónico y no le dieron su tarjeta. Con ésta, podrán acercarse al lector, las puertas se abrirán y el sistema debitará automáticamente el saldo, de acuerdo al número de viajes que realice. El pasaje cuesta 45 centavos; 22 para los adultos mayores y estudiantes; y 10 centavos para los usuarios con discapacidad.
‘No hay vuelta atrás, el Metro de Quito es una realidad’
Diego Giraldo, gerente de operaciones del Metro de Medellín, saluda a cada usuario, sin excepción. Dice que para que sirva una obra de este tipo, el personal debe ser amable. Por eso, asegura, han capacitado a 550 quiteños para que sean operadores de tren y agentes de estación en el Metro. “Hoy todos se moverán mucho más fácil, de un lugar a otro. El Metro es una realidad, no hay vuelta atrás”, aseguró.
Primera mañana, primer intento de robo en el Metro; pero la persona implicada fue detenida y puesta a órdenes de la justicia de forma inmediata por un policía que se encargaba de la seguridad.
El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, asegura que la Unidad Especializada del Metro de Quito será la encargada de brindar seguridad a los usuarios del nuevo sistema de transporte.
Son un total de 257 policías desplegados en puntos estratégicos, en las 15 paradas. Pues, al estar bajo tierra, no existe señal telefónica ni servicio de internet. Por eso, la seguridad ha sido reforzada.
Dentro de los vagones, hay un citófono para evitar el acoso en el transporte público, en este la víctima denunciará la agresión con la palabra ‘cero’, para proceder con el protocolo de atención.
Datos sobre el Metro
Fue inaugurado oficialmente, tras 12 años y 5 administraciones.
– El Metro opera de lunes a viernes desde las 05:30 hasta las 23:00.
– Los sábados se atenderá de 07:00 a 23:00.
– Domingos y días feriados será de 07:00 a 22:00
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