Ecuador pierde atractivo para la inversión extranjera

La caída de 163 millones de dólares convierte a Ecuador en uno de los países sudamericanos con mayor deterioro en la recepción de inversión extranjera.

POR: Juan Camilo Escobar

Ecuador recibió apenas 318 millones de dólares en inversión extranjera directa (IED) durante 2024, lo que representa una caída del 23,9% respecto a los 481 millones registrados en 2023, según el informe más reciente de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que recoge estadísticas nacionales. 

La cifra lo ubica entre los países con menor captación de capital extranjero de toda la región, en un año en que la IED regional mostró una tendencia de crecimiento.

Así, las entradas de IED en América Latina y el Caribe aumentaron 7,1%, alcanzando los 188.962 millones de dólares. Brasil y México lideraron el ranking regional con 71.070 millones y 45.337 millones de dólares, respectivamente. Ambos países concentraron el 62% del total regional, con aumentos interanuales del 13,8% y el 47,9%.

En comparación, Ecuador representó apenas el 0,17% de la inversión extranjera total recibida por la región. Incluso economías más pequeñas, como Paraguay (576 millones) y Uruguay (2.457 millones), atrajeron significativamente más capital extranjero.

Según la Cepal, uno de los principales factores detrás del descenso fue la fuerte contracción de los préstamos entre empresas, que ya eran negativos y cayeron un 349% adicional. “Los aportes de capital, el mayor componente de la IED en 2024, también disminuyeron un 13% con respecto a 2023. Por el contrario, la reinversión de utilidades aumentó un 16%, alcanzando su nivel más alto desde 2018”, indica el informe.

Además, la Cepal indica que el país no logró insertarse en el repunte de inversión manufacturera ni en el auge digital que beneficiaron a otros países de la región.

Economistas consultados atribuyen este desplome a factores estructurales y de gobernabilidad. El exministro de Finanzas Mauricio Pozo señaló que “la caída en la inversión extranjera se debe a la falta de incentivos para traer recursos, a una ley laboral que no funciona y que bloquea nuevas contrataciones, a una justicia que no es independiente, a una inseguridad que complica y a una inestabilidad tributaria”.

El economista Jorge Calderón coincidió en que el país carece de un entorno atractivo para la inversión. “Lamentablemente, Ecuador sigue a la cola. Esa cifra es paupérrima, si la comparamos con Colombia o Perú. No basta con pedir que vengan a invertir; se necesita estabilidad, institucionalidad y visión de largo plazo”, afirmó.

Calderón recordó que esta pérdida de atractivo no es nueva y se ha profundizado desde 2020. “El país ha sido testigo de disputas entre poderes del Estado, muerte cruzada, elecciones anticipadas… todo eso genera una imagen de inestabilidad que espanta a los inversionistas”, dijo.

Pese a esta caída, la Cepal destaca que los anuncios de nuevos proyectos en Ecuador sumaron 822,8 millones de dólares en 2024, un incremento interanual del 40,3% y el nivel más alto registrado desde 2018. Entre estos, el sector de los metales representó aproximadamente el 42,1% del valor estimado, impulsado principalmente por la aprobación del proyecto de cobre y oro El Domo, liderado por la firma canadiense Silvercorp Metals Inc.

China se consolidó como la principal fuente de inversión extranjera en Ecuador, con 111 millones de dólares en 2024, un aumento del 50% con relación al año anterior. Esta cifra representa el 35% del total de IED que ingresó al país, una proporción inusualmente alta en comparación con la mayoría de países de la región, donde la participación china suele ser menor.

Caída en 5 años

Según la Cepal, el promedio de IDE que recibió Ecuador en la década 2010-2019 fue de 797 millones de dólares anuales, más del doble de lo recibido en 2024. Es decir una tendencia de deterioro que se profundizó a partir de 2020, año de la pandemia:

Así, estas cifras reflejan que en cinco años, la IED en Ecuador cayó un 71,6%, lo que para los dos economistas consultados representa un entorno cada vez menos atractivo para la inversión internacional.

A diferencia de países como México, donde la IED fue impulsada por la proximidad geográfica al mercado estadounidense, o Perú, que repuntó por el sector minero, Ecuador no registró aumentos en sectores estratégicos ni en anuncios de nuevos proyectos, según otros cuadros del informe.

Calderón consideró que el sector minero puede ser clave para dinamizar la inversión, como ocurrió entre 2018 y 2020, cuando las inversiones superaron los 1.000 millones de dólares por el desarrollo de proyectos extractivos. “Hoy no se construye porque ya se construyó, pero vemos los efectos en exportaciones y recaudación tributaria. Cantones como Yantzaza y El Pangui, antes entre los más pobres, ahora figuran entre los primeros del país en recaudación”, dijo.

El informe de la Cepal es enfático en señalar que, para revertir estas tendencias, los países deben desarrollar instituciones sólidas y políticas productivas integradas. En el caso de Ecuador, el bajo desempeño de 2024 refleja tanto la ausencia de un marco competitivo como la falta de estrategias claras para alinear la inversión extranjera con un modelo de desarrollo sostenible.

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