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Dos movimientos ‘reencauchados’ y uno nuevo van tras el balotaje
septiembre 8, 2023

El PID y Mover, de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN), y la Revolución Ciudadana son las organizaciones que auspician las candidaturas de Daniel Noboa y Luisa González. ¿Qué hay detrás de cada uno? Estos son sus orígenes.

El 15 de octubre los ecuatorianos no sólo elegirán el Presidente o Presidenta de la República, sino que, tras ellos, hay organizaciones políticas que, automáticamente, asumirán el poder. 

Por un lado, están los movimientos Pueblo, Igualdad y Democracia (PID) y el Movimiento Verde Ético Revolucionario y Democrático (Mover), que se unieron en la alianza Acción Democrática Nacional (ADN), que auspicia la candidatura de Daniel Noboa Azín, aunque él no es militante de ninguna de esas agrupaciones. Mientras que la Revolución Ciudadana optó por impulsar la candidatura de su militante Luisa González. 

Para el analista político Alfredo Espinosa, estas alianzas y candidaturas reflejan, una vez más, la crisis de los partidos políticos tradicionales. 

En el caso de Noboa, recuerda que su paso por la Asamblea fue con el auspicio del movimiento Ecuatoriano Unido, organización que ya desapareció, por lo que, al quedarse sin una estructura partidaria para las elecciones anticipadas del 2023, buscó el apoyo de otras organizaciones y lo logró a través de los movimientos que forman la alianza. Para Espinosa, estos partidos vieron la posibilidad de participar con candidato propio, que además es joven y con suficientes recursos para solventar por sí solo la campaña electoral. «Lo importante para estás organizaciones es mantenerse en el escenario electoral y, a la larga, acertaron con Noboa», dijo el analista. 

Sobre la Revolución Ciudadana asegura que es un movimiento que tuvo su génesis en la desaparecida Alianza PAIS —al igual que MOVER—, que, al fraccionarse uno de los grupos en conflicto, fue ganando espacio en otras organizaciones y, poco a poco, se consolidaron bajo este nuevo nombre pero siempre bajo el liderazgo de Rafal Correa, expresidente de la República, prófugo de la Justicia por actos de corrupción en su Gobierno, aunque tiene estatus de refugio en Bélgica.  

Este es el origen de las tres agrupaciones que están detrás de los candidatos finalistas:

Pueblo, Igualdad y Democracia (PID)

Tras un proceso de cinco años, logró ser inscrito como movimiento en el Consejo Nacional Electoral, en el 2022. Se define como un movimiento de izquierda moderada que cree en la democracia participativa “junto al pueblo, respetando al empresario que genera oportunidades y puestos de trabajo”. Tiene delegaciones en las 24 provincias, especialmente en Pichincha, Guayas, Manabí y Azuay. 

Uno de los fundadores y su actual director es Arturo Moreno, primo del expresidente de la República Lenín Moreno. Arturo Moreno constaría como uno de los asambleístas nacionales que logró meter la alianza ‘ADN’ en las elecciones del 20 de agosto. Para el PID esta es su segunda intervención electoral. La primera fue en las elecciones seccionales de 2023, en las que logró ocho alcaldías en alianzas con otras organizaciones políticas. 

Movimiento Verde Ético Revolucionario y Democrático (Mover) 

Es el Movimiento Alianza PAIS cambiado de nombre. En su versión original gobernaron 14 años a través de Rafael Correa (10 años) y de Lenín Moreno (cuatro años). Ya en el poder, Moreno marcó distancia con Correa y provocó la fractura del movimiento. El bloque oficialista de ese entonces también se dividió entre los leales a Correa —que anunciaron su desafiliación del Movimiento— y los que aceptaron el liderazgo de Moreno. Los que se fueron de la organización fueron los considerados cuadros “duros” del Movimiento PAIS, y se quedaron los de menor representación. Para las elecciones del 2021, la candidata presidencial de PAIS, Ximena Peña, apenas alcanzó el 1,54% de la votación, quedando en noveno lugar de 16 candidatos que se presentaron. Tampoco lograron escaños en la Asamblea. Ya sin esa fuerza contundente que tuvo Alianza PAIS y debido a que se le asociaba con una gestión cuestionable, decidieron modificar su nombre, imagen y colores pero conservando el número 35. Con el nuevo nombre participaron en las elecciones seccionales del 2023, pero apenas obtuvieron 4 alcaldías y todas en alianzas con otras agrupaciones.

Revolución Ciudadana 

Su historia va de la mano del Movimiento Mover, aunque es un poco más polémica. Tras el fraccionamiento que sufrió Alianza PAIS en el 2017, los correístas que se separaron del movimiento intentaron formar una agrupación aparte, pero no lograron que el Consejo Nacional Electoral (CNE) les inscribiera como nueva organización política. 

Se acercaban las elecciones seccionales del 2019 y el correísmo buscaba la forma de candidatizar sus propios cuadros. Entonces, lograron que les acogiera el movimiento Fuerza Compromiso Social, una organización fundada y dirigida originalmente por Iván Espinel. Al momento, Espinel cumple una sentencia de 10 años de prisión por lavado de activos.

En ese momento político, con Espinel preso, Fuerza Compromiso Social se encontraba a la deriva, sin cuadros fuertes para esas elecciones seccionales, por lo que se dio paso a esa suerte de alianza que permitió a la correístas Paola Pabón, por ejemplo, ganar la Prefectura de Pichincha.

Pasadas las seccionales del 2019 los correístas se mantuvieron en la organización y, de apoco, fueron captando puestos de dirección al interior de Fuerza Compromiso Social, reduciendo espacios a los militantes originales. 

Para las elecciones presidenciales del 2021 Fuerza Compromiso Social, con más cuadros correístas que la propia organización, se unió a Centro Democrático para formar la coalición Unidos por la Esperanza (UNES), y postuló como presidente a Andrés Arauz. 

La alianza no ganó la Presidencia de la República, pero se convirtió en la primera fuerza legislativa, al obtener 48 escaños. Sólo en el membrete se decía que era la bancada de UNES, ya que, en la práctica, era la bancada correísta, ya que la mayoría de sus miembros, por no decir todos, respondían a esa línea política. 

En septiembre del 2021 el CNE aprobó el cambio de nombre del Movimiento Fuerza Compromiso Social a Movimiento Político Revolución Ciudadana, que incluyó cambio de colores, logos e imagen. Como Revolución Ciudadana participaron en las elecciones seccionales y en las elecciones anticipadas de este mismo año. 

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