Según cifras preliminares, el asueto de Semana Santa no generó la ocupación hotelera que se esperaba. Y, aunque en Carnaval se registraron cifras positivas, esa es tradicionalmente una temporada alta.
Ecuador vivió un feriado más este último fin de semana. Pero este no fue uno cualquiera, pues es uno de los asuetos en los aplica la disminución del Impuesto al Valor Agregado (IVA). En enero, el Ejecutivo emitió una serie de medidas para incentivar el turismo a nivel nacional. Desde entonces se han celebrado dos feriados, ¿cuán efectivas han sido estas decisiones?
Pese a los estragos que causó la pandemia por el Covid-19 en las economías de la mayoría de países del mundo, y en especial en el sector del turismo, según el Ministerio del Turismo, en el 2022 se alcanzó una cifra récord en ingresos por gastos turísticos en feriados en el país.
La institución estimó que se recaudaron USD 480 millones. El Ministerio señaló que la cifra de recaudación de los 10 feriados del anterior año supera a la del 2015.
Ante un panorama de aparente recuperación, el Gobierno apostó a inicios de año por la reducción del IVA, del 12% al 8%, a la prestación de todos los servicios definidos como actividades turísticas en tres feriados del 2023: Carnaval: 18, 19, 20 y 21 de febrero; Semana Santa: 7, 8 y 9 de abril y Día de Difuntos e Independencia de Cuenca: 2, 3, 4 y 5 de noviembre. En total suman 11 días.
Hasta el momento, ya se han celebrado dos de esos feriados: Carnaval y Semana Santa. En ambos, como lo decretó el Ejecutivo, el IVA se redujo en cuatro puntos en los establecimientos del sector turístico.
El feriado de Carnaval se celebró entre el 18 y 21 de febrero. En estos cuatro días se alcanzó una cifra récord desde 2015 en cuanto a ventas del sector turístico, pues los turistas gastaron USD 94 millones en diversas actividades.
De hecho, el gasto turístico del último Carnaval supera en USD 17 millones al valor registrado en ese feriado en el 2022 y en 30 millones en relación al 2019, es decir, respecto al periodo de pre pandemia.
Además, según el ECU 911, hubo un movimiento de más de 2,5 millones de personas, con un alto porcentaje de visitas a provincias como Bolívar, Galápagos, Tungurahua, Manabí y Azuay.
Si bien estas cifras muestran un evidente aumento de las ventas relacionadas al sector turístico, también indican que la cifra de este año se encuentra dentro de la tendencia a la alza que ha experimentado el indicador en los últimos seis años, a excepción del 2021.
Mientras tanto, la ocupación hotelera a nivel nacional fue del 55%, igualando al dato de 2015 y superando a los demás años, inclusive a aquellos previos a la pandemia, cuando la ocupación hotelera máxima fue de 51% (en el Carnaval del 2018).
Aunque las cifras que dejó el feriado de Carnaval de este año también indican un aumento considerable de la ocupación hotelera respecto al anterior periodo, este incremento también responde a la tendencia de los últimos seis años, a excepción del 2021.
De hecho, aunque la tendencia ha ido a la alza, los cambios de este indicador han sido más tímidos, pues en el 2023 apenas se superó la cifra del 2018.
Aunque, si se compara con el 2022, el aumento sí ha sido considerable. La diferencia entre estos dos años es de 12 puntos porcentuales.
El sector del turismo no despegó en Semana Santa, según cifras preliminares
El Ministerio de Turismo aún no dispone de las cifras oficiales que dejó el feriado de Semana Santa, celebrado el último fin de semana. Sin embargo, algunos gremios ya tienen estimaciones y no son alentadoras, tomando en cuenta las proyecciones que tenía este sector.
Mauricio Letort, presidente de la Federación Hotelera del Ecuador (Ahotec), comenta que este feriado dejó resultados variables en cuanto a ocupación alrededor del país.
Por ejemplo, comenta que en Quito hay hoteles que tuvieron buena ocupación. Aunque explica que se dio por la presencia de turistas extranjeros antes que nacionales.
“Algunos hoteles nos mencionan ocupaciones de 30%, 40%, 50% y hasta 60%. Nuevamente, más por el receptivo, fue muy poco por el turismo interno ecuatoriano”, detalla.
Holbach Muñetón, presidente de la Federación Nacional de Cámaras Provinciales de Turismo, explica que en Quito, en general, la tasa de ocupación llega al 50%.
Mientras tanto, Letort añade que hay reportes del 40% de ocupación en Loja y en Cotopaxi.
Según estas mismas cifras preliminares, las mejores tasas de ocupación se habrían registrado en Manta y Baños. Incluso existen reportes de que en algunos hoteles de Napo este indicador llegó al 85%, pero la tasa a nivel de la provincia llegaría al 72%, según Muñetón.
En Baños, la ocupación llegó al 70%, mientras que en Guayaquil se ubicó entre el 50% y el 55%.
En el otro extremo se encuentran Esmeraldas y Santa Elena, según Letort. En Atacames y en algunas playas de la provincia verde la ocupación estaría alrededor del 20%. Incluso explica que hubo locales que no recibieron ni un solo turista en todo el feriado.
Jorge Benítez, presidente de la Cámara Provincial de Turismo de Esmeraldas, es más pesimista, pues calcula que la ocupación se encontraría en un 15% en la ciudad de Esmeraldas.
Benítez asegura que la inseguridad ha bajado la producción al 80% en general, pues recuerda que los ingresos anteriormente les servían para subsistir, pero ahora la situación es muy compleja, sobre todo para las personas que sólo se dedican a esta actividad.
Comenta que hay incluso personas con cuotas de créditos vencidas por las dificultades económicas que ha desencadenado esta situación.
Según Letort, hay dos razones que provocaron esta baja ocupación de los hoteles de esta provincia. Primero, explica que se debe al pésimo estado de las vías principales para acceder a sus principales playas.
La otra razón tendría que ver con la inseguridad que se vive en las calles de la provincia fronteriza y el Estado de Excepción que rige por esa misma razón.
Esas dos mismas razones habrían provocado una caída en la ocupación de hoteles en Santa Elena, según Letort. En esa provincia, Muñetón explica que aspiraban llegar al 100%, pero apenas alcanzaron el 40%.
Por su parte, Muñetón detalla que el mal estado de las vías debido a las lluvias, pero principalmente la inseguridad y el toque de queda que rige en algunas provincias son las razones de estas cifras poco alentadoras que ha dejado este feriado.
“El turismo es una actividad lúdica. La gente quiere divertirse, quiere disfrutar. El Estado de Excepción no ayuda para nada, más bien es restrictivo”, explica por su parte Letort.
Muñetón critica la medida, pues considera que no es una herramienta útil. “El tema de la seguridad uno lo arregla partiendo de solucionar la situación económica, generando las oportunidades. Esa es la preocupación que tenemos como sector turístico nosotros”, indica.
Reducción del IVA en feriados no ha incentivado el turismo, indican gremios
Letort explica que la reducción de cuatro puntos al IVA en establecimientos turísticos durante algunos feriados con el fin de que se generen más ventas es una medida inusual, porque en el país generalmente no existen incentivos positivos.
Pero, aclara que, específicamente para el sector hotelero, no es una medida que les ayude mucho, más bien les complica.
Por ejemplo, explica, el feriado de Carnaval es tradicionalmente una temporada de alta ocupación hotelera. Así que, en realidad esta medida no incentiva la ocupación, sino que sólo le da un alivio al consumidor durante estos días.
“Un incentivo normalmente busca que la gente consuma en épocas de temporadas bajas”, dice. “El incentivo en los feriados es en realidad una ayuda al consumidor para que gaste menos en estas épocas”, añade.
Letort explica que, de hecho, esta medida es una complicación para la industria hotelera. Comenta que en los hoteles deben ajustar los sistemas informáticos durante estos días. “Tenemos que hacer que el cliente pague a la media noche con IVA del 12% y al día siguiente con el 8% y para eso tenemos que reforzar la recepción, para hacer toda la facturación”, indica.
Por otro lado, el presidente del gremio hotelero también indica que, de modo general, en el primer trimestre fue un buen periodo para la hotelería, especialmente en Quito y Guayaquil.
Letort le atribuye a esta mejoría la reactivación económica del país, aunque advierte que las amenazas de nuevas protestas sociales y la inestabilidad que ha causado el juicio político contra el presidente de la República, Guillermo Lasso, pueden provocar que los turistas extranjeros escojan otros destinos antes que Ecuador.
Por su parte, Muñetón asegura que no es posible determinar la efectividad de la medida adoptada en enero, pues asegura que “los feriados se venden solos, sin promocionarse”.
Y partiendo de esa premisa, las cifras iban a ser positivas en los feriados sin la necesidad de esa medida.
“Ellos deberían haber hecho la rebaja del IVA cuando no hay turistas, entre semanas, o de corrido”, asegura.
Además, explica que, si bien las cifras que se han registrado en el primer trimestre en este sector son positivas, las estadísticas deberían ser aún mejores, según la tendencia que se observaba el año anterior.