Los alternos actuarán hasta la elaboración del informe para primer debate; luego, todo quedará en manos de los principales que regresarán de sus licencias. La ley fue enviada por el Gobierno como urgente en materia económica.
POR: Hugo Constante
Por la coyuntura política electoral, marcada por la campaña, el tratamiento del proyecto de Ley para impulsar la economía de las mujeres emprendedoras está a cargo de dos grupos en la Comisión de Participación Ciudadana de la Asamblea. El primero es el de asambleístas suplentes principalizados, quienes deberán elaborar el informe para primer debate. La Comisión está integrada por nueve miembros, siete de los cuales son suplentes que vienen actuando en la Comisión mientras los titulares están en campaña. Sólo Gissela Garzón (correísmo) y Esperanza Moreta (PSC) son titulares. Además, Moreta está a cargo de la Comisión, en su condición de vicepresidenta, y es lo que le permite a esta Mesa sesionar para tratar el proyecto.
Por su carácter de urgente en materia económica, la propuesta de normativa, remitida por el presidente de la República, Daniel Noboa, debe ser tratada por la Asamblea hasta el 22 de febrero en todas sus fases, antes de que pase al Ejecutivo.
Es por eso que, de acuerdo con el cronograma de trabajo de la Comisión, los suplentes esperan aprobar el informe para primer debate el 6 de febrero y hasta ahí llegaría su labor.
El segundo grupo corresponde a los asambleístas principales, ya que el informe para primer debate será conocido por el Pleno el 11 de febrero para recibir las observaciones. A esa fecha ya deberían haberse reincorporado todos los titulares, ya que la licencia sin sueldo aplica sólo hasta el 9 de febrero. A partir de ese primer debate, el proyecto de Ley será tratado por los titulares, tanto en la Comisión como en el Pleno. La aprobación del texto final (segundo debate) está prevista para el 21 de febrero.
El aporte de los suplentes
La legisladora Lourdes Alta Lima, alterna de Lucía Posso (Avanza), manifestó que este proyecto puede ser una alternativa para presentar al país una propuesta con parámetros claros para las mujeres emprendedoras. “Es una oportunidad que hayamos sido principalizados, ya que está en nuestras manos mejorar el proyecto de Ley. Podemos presentar propuestas, ya que durante el tiempo que estemos acá lograremos por lo menos presentarla para primer debate”, indicó la legisladora.
Ernesto Pazmiño Chávez, alterno de Franklin Samaniego (correísmo), dijo que deben entregar un proyecto de Ley que tenga eficacia jurídica para beneficio de las mujeres emprendedoras “Quisiéramos estar tratando un proyecto económico urgente que tenga esa característica, que cubra las necesidades inmediatas. Por eso, estamos tratando de construir y de incorporar elementos que garanticen el acceso de las mujeres emprendedoras, que se termine la informalidad”, dijo.
Moreta garantizó que el aporte de los suplentes será tomado en cuenta en la elaboración del informe, pero que también será importante contar con la experiencia de los asambleístas titulares para fortalecer el proyecto. “Las propuestas de los asambleístas que este momento están principalizados serán muy importantes”, dijo Moreta, descartando que cuando se incorporen los principales hagan un “borrón y cuenta nueva” para construir el informe para segundo debate.
Las observaciones
Libia Rivas, presidenta del Instituto Ecuatoriano de Estudios Legislativos; y Andrea Obando, abogada y activista en Derechos Humanos, como parte de la sociedad civil, fueron recibidas en comisión general para que den sus aportes a la construcción del informe.
Rivas dijo que hay normativa existente sobre emprendimiento, por lo que la propuesta de Noboa podría haberse incorporado a alguna de ellas, y no tratarla como una normativa específica, independiente. Por ejemplo, dijo, como un capítulo especial a la Ley de Emprendimiento e Innovación, aprobada en 2020, que busca establecer el marco normativo general que incentive esa actividad. Mientras que la Ley para Impulsar la Economía Violeta, aunque con otro enfoque, busca el empoderamiento y el crecimiento personal con enfoque de género, por lo que también podía incorporar la propuesta del Presidente de la República.
Sin embargo, su principal observación fue el grupo que se beneficiaría con el nuevo proyecto de Ley. Dijo que el urgente económico está destinado a mujeres emprendedoras que ya están formalizadas, que declaran sus impuestos, que están regularizadas, que tienen un estatus jurídico. “Lo que hace falta es incorporar a la formalización a la mayor parte de mujeres, sobre todo a aquellas jefas de hogar”, dijo. Esto debido a que ese grupo de mujeres, manifestó, no saben que deben abrir un Registro Único de Contribuyentes (RUC), emitir una factura, o declarar varias obligaciones tributarias. “Y no conocen los beneficios de regularizarse”, agregó Rivas.
Por su parte, Obando dijo que las mujeres de la ruralidad e indígenas enfrentan condiciones precarias e informales de trabajo, por lo que este proyecto de Ley busca promover incentivos fiscales y financieros para que las mujeres emprendedoras reactiven su economía. Pero coincide con Rivas en que a la propuesta del Ejecutivo le falta incorporar a las mujeres emprendedoras no formalizadas, lo que puede generar varias consecuencias negativas, como la desigualdad de oportunidades. “Las mujeres emprendedoras informales quedan excluidas de los beneficios, de los incentivos, de los programas establecidos por la Ley perpetuando la desigualdad económica y social”, dijo Obando. La especialista dijo que un paso necesario que se debe dar es la simplificación de los trámites para la formalización.
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